SEVILLA 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet, ha ofrecido este viernes "lealtad institucional y diálogo" al nuevo presidente de la Junta, Juanma Moreno, y ha agradecido la labor de Susana Díaz en sus años al frente del gobierno andaluz.
En el acto de posesión del 'popular' Juanma Moreno como presidente de la Junta, Batet, como representante del Gobierno central, ha trasladado al presidente "la plena disposición del Gobierno de España" para abordar "conjuntamente y desde la cooperación institucional y el diálogo" las tareas que asume como presidente de la comunidad.
Asimismo, le ha deseado a Moreno "la mayor fortuna" en su mandato y cooperación entre ambos gobiernos. "Su mandato estará presidido por el sentido de la responsabilidad, por el ánimo de honrar a la institución que representa y en la búsqueda incesante del interés general de los andaluces". "Enhorabuena, presidente", ha apostillado.
De igual manera, Batet también ha tenido palabras de agradecimiento público el trabajo del gobierno de la socialista Susana Díaz y la actuación de su administración tanto durante el gobierno de Pedro Sánchez como con el gobierno de Mariano Rajoy. "Nadie podrá negar desde los valores constitucionales, el avance de Andalucía en estos años de democracia", ha apuntado.
Según ha explicado la ministra, a Moreno, como presidente de la Junta de Andalucía, le corresponde definir la dirección política y las actuaciones de la Junta; mientras que al Gobierno de España le toca "respetar esas decisiones y cooperar en lo posible en hacerlas efectivas".
"Ambos gobiernos, aún desde sus diferencias, respondemos a una misma obligación de impulso y garantía de derechos y garantía del funcionamiento adecuado de los servicios públicos", ha apuntado, toda vez que ha afirmado que conseguirán "llegar a múltiples acuerdos y desarrollar proyectos conjuntos" que hereda de la etapa de Susana Díaz al frente de la Junta y abordar nuevas iniciativas.
Batet ha hecho hincapié en que, "más allá de la discusión entre partidos y orientaciones políticas", el respeto a los ciudadanos y a sus administraciones públicas "exige a los gobiernos esa lealtad". Una lealtad que, a su juicio, se concreta en tres extremos.
En primer lugar, el respecto a las competencias y responsabilidades de cada institución, lo que "exige cooperar en la aplicación de las decisiones de cada instancia, aún cuando no concuerden con las opciones propias". En segundo lugar, "la búsqueda de acuerdos y ámbitos de avances conjuntos", ha precisado Batet, teniendo en cuenta que "los proyectos conjuntos, aunque impliquen renuncias o cesiones a objetivos máximos, resultan siempre más efectivos y exitosos que las iniciativas aisladas".
En tercer lugar, ha defendido la actuación en el respeto del marco constitucional, estatutario y de legalidad, "asumiendo plenamente los mandatos que incluyen y las obligaciones de garantía y desarrollo de los mismos". En este punto, se ha detenido a explicar que la Constitución Española, en palabras del Tribunal Constitucional (TC), "no impone un proyecto político concreto y protege el desarrollo de diferentes proyectos políticos, siempre que sean coherentes con nuestro marco de derechos y libertades".
La ministra de Política Territorial y Función Pública ha destacado que, en cada uno de estos tres elementos, corresponde a ambos gobiernos "el impulso, cooperación activa y participación constructiva" y ha garantizado que, "desde hace muchos años, no existen administraciones públicas cautivas de un gobierno" sino "administraciones profesionales que asumen la dirección política que en cada caso corresponde".