SEVILLA 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Centro de Servicios de Renfe en la estación de trenes de Santa Justa asegura que el pasado 12 de octubre, día en el que se perdió la pista del joven cordobés Álvaro Prieto cuyo cadáver fue localizado este pasado lunes entre dos vagones, le ofreció un cargador para "encontrar el billete y poder ayudarle a coger su tren". "En todo momento, la conversación transcurre con normalidad", afirma dicho centro en un informe consultado por Europa Press.
Según fuentes cercanas a la investigación, Álvaro se acercó el 12 de octubre a la oficina del Centro de Servicios porque "no encontraba el billete para tomar el tren". Las trabajadoras que en ese momento estaban en la oficina le solicitaron entonces al joven, de 18 años, "ciertos datos necesarios para poder" localizar el billete, se recoge en el informe citado.
En primer lugar, facilitó un correo electrónico en el que se localizó un billete, pero no el que él buscaba. A continuación, se le pidió la tarjeta de crédito con la que realizó la compra pero Álvaro entonces aclaró que disponía de una tarjeta virtual, "señalando su teléfono móvil, el cual parece estar apagado", por lo que se le ofrece un cargador e incluso se le indica dónde lo puede cargar, "todo para encontrar su billete y poder ayudarle a coger su tren".
"El viajero manifiesta que cree que no funciona y, por lo tanto, buscamos otras formas de poder ayudarle", se subraya en el informe emitido por el Centro de Servicios. Finalmente, el joven facilitó el correo de su padre y con ello se localizó el billete de ida y vuelta Sevilla-Córdoba-Sevilla, un Avant con salida ese 12 de octubre a las 7,35 horas. "Se le hace saber que ese tren había salido ya y se le informa de la política de dichos trenes en cuanto a la pérdida de tren", apostilla el Centro de Servicios.
Al ser informado de los siguientes trenes y horarios, "el viajero coge su cartera y se dirige a las taquillas, cruzándose con una tercera compañera quien se asegura de que efectivamente el viajero estaba en las taquillas como para comprar un billete". Según las fuentes cercanas a la investigación, en la taquilla número 3, Álvaro intenta "ir a Córdoba con una TSC de Cercanía", lo cual no es posible.
"Debía comprar un billete y el próximo tren era un AVE", con un precio de 40 euros. "Fue a pagar con el móvil y se dio cuenta de que no tenía batería. Se le dijo que si tenía cargador lo podía enchufar en cualquier enchufe de la estación pero se marchó de la zona de las taquillas", sentencian las fuentes consultadas.