GRANADA 29 May. (EUROPA PRESS) -
El cien por cien de los trabajadores de la concesionaria del servicio de autobuses urbanos de Granada está secundando el nuevo paro de 24 horas convocado este miércoles por la falta de avances en las negociaciones con la empresa ALSA, antigua Rober, para aplicar mejoras laborales.
Tanto CCOO, que preside el comité de empresa, como la empresa concesionaria del servicio han cifrado el seguimiento de la huelga en un cien por cien. Los servicios mínimos, de un 30 por ciento, han salido sin incidentes a primera hora de la mañana, aunque la huelga está afectando a la vida diaria de centenares de granadinos que usan el autobús para desplazarse por la ciudad.
El conflicto está pendiente de un nuevo encuentro entre la empresa y los representantes de los trabajadores esta tarde a las 16,00 horas para tratar de acercar posturas después de que el martes acabaran sin un acuerdo que permitiera desconvocar las protestas. La aplicación de los tiempos de descanso y la subida salarial son los principales escollos en la negociación.
La jornada huelga se está desarrollando con servicios mínimos del 30 por ciento de 6,00 a 9,00 horas, y de 13,00 a 16,00 horas, y con un vehículo solamente por línea el resto de horarios, al igual que está previsto --si no se llega a un acuerdo antes-- para el viernes 31 de mayo, que suele ser un día de gran afluencia en la Feria de Granada, y los días 7, 14, 21 y 28 de junio.
El presidente del comité de empresa, José Manuel Roldán (CCOO), ha explicado en declaraciones remitidas a los medios que esta tarde continuarán negociando con el deseo de llegar a un acuerdo, especialmente por los ciudadanos que están sufriendo las repercusiones de estos paros.
El martes los representantes de los trabajadores accedieron, con algunas condiciones, a la aplicación de los nuevos tiempos de descanso en 2027 como venía reclamando la empresa. Sin embargo, la patronal les ha trasladado la pretensión de restar los costes de otros conceptos a la subida salarial prevista, extremo que rechaza la plantilla.
Por su parte, el grupo municipal del PSOE en el Ayuntamiento de Granada ha lamentado la "irresponsabilidad" de la alcaldesa de Granada, Marifrán Carazo (PP), en este conflicto laboral "que ha provocado que uno de los días más importantes de la agenda de la ciudad, como es La Tarasca, se vea ensombrecido por una huelga de autobuses" que podría haberse evitado a su juicio si la regidora "se hubiera implicado para llegar a un punto de acuerdo".