JAÉN 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Sección Segunda de la Audiencia de Jaén ha condenado a cinco años y un día de prisión a un hombre, de 35 años, por abusar sexualmente de forma continuada de su cuñada desde que ésta tenía 12 años y hasta prácticamente la mayoría de edad.
Además de la pena de cárcel, la sentencia recogida por Europa Press le impone seis años de libertad vigilada y otros seis años por encima de la pena de prisión de prohibición de comunicarse o acercarse a la víctima. En concepto de responsabilidad civil, deberá indemnizar a la menor en 15.000 euros por daños morales.
Mientras que la joven en su declaración ante el tribunal en el juicio celebrado el pasado 8 de octubre en la audiencia de Jaén se ratificó en su denuncia, el acusado negó las acusaciones y se declaró inocente.
La sentencia subraya que el testimonio de la menor es "consistente, coherente y creíble", además de contar con "datos objetivos de carácter periférico que confirman de modo contundente la realidad del testimonio". En este punto se hace referencia al informe emitido por el Instituto de Medicina Legal (IML) que "constata la existencia en la menor de una sintomatología compatible con ser víctima de violencia sexual".
Durante el juicio, la joven declaró por videoconferencia que todo comenzó cuando ella tenía 12 años. A partir de esta edad se sucedieron los tocamientos íntimos mientras ella "sentía repulsa y miedo", pero no contó nada por proteger a su hermana y al hijo que ésta tenía con el acusado.
"Aprovechaba situaciones en las que yo no me pudiera defender para tocarme", contó la joven y añadió que el acusado, militar de profesión, nunca le amenazó para que no contara lo que estaba ocurriendo, pero sí le prometía que dejaría de hacerlo si no contaba nada.
La joven, ahora con 21 años, declaró que fueron "incontables" las ocasiones en las que su cuñado, al que conocía desde que tenía tres años, la sometió a tocamientos y prácticas sexuales hasta que finalmente en 2022 se decidió a contárselo a su hermana, que sobre la marcha hizo una videollamada al acusado para pedirle el divorcio.
Antes ya se lo contó a sus amigas más íntimas e incluso a su madre, que no vivía con ella porque trabajaba fuera de la Península y a la que solo le dijo que el marido de su hermana había intentado abusar de ella.
El acusado, rechazó todos los extremos de las acusaciones y apuntó que todo responde a una "extorsión velada" para que él firmara el convenio regulador del divorcio ya que él nunca tuvo problema alguno con la hermana de su mujer. "La relación era cordial", dijo el acusado, que manifestó también no conocer por qué su cuñada ha formulado tales acusaciones que "no son verdad".
La sentencia no es firma y puede ser recurrida en apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).