GRANADA 6 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha detenido a un joven albano de 27 años por la presunta comisión de delitos de cultivo y elaboración de droga y de defraudación de electricidad en una operación en la que ha desmantelado un centro de producción y almacenaje de marihuana en Loja, en el Poniente de Granada, en el que se han intervenido más de 66 kilos de esta sustancia estupefaciente.
Según ha informado la Guardia Civil en una nota de prensa este miércoles, la operación comenzó con numerosas llamadas de vecinos de una calle de Loja en las que denunciaban continuos cortes de suministro eléctrico en sus viviendas.
Los investigadores de la Guardia Civil, con la ayuda de operarios de Endesa, llevaron a cabo una serie de mediciones en esa calle y constataron que, en una de las viviendas había un alto consumo de electricidad, concretamente más de 30 amperios, un consumo muy superior al habitual para una vivienda, lo que constituía "un indicio claro" para los agentes de que en ella se podía estar cultivando cannabis sativa.
Tras obtener la autorización judicial para registrar la vivienda sospechosa, la Guardia Civil desplegó un dispositivo de seguridad en torno a la casa y procedió al registro. Cuando la persona que estaba dentro vio a los agentes llamando a su puerta "huyó por los tejados colindantes hasta que en un momento dado resbaló y cayó al suelo desde una altura superior a los tres metros, quedó malherido y fue evacuado primero al hospital de Loja y más tarde al hospital de San Cecilio de Granada con heridas graves en ambos pies".
En el registro los agentes descubrieron que el joven detenido habría habilitado cuatro habitaciones con aparatos de última tecnología para el cultivo "indoor" de cannabis sativa y una quinta habitación para el secado de los cogollos de marihuana. En esta última estancia los agentes se incautaron de 66,6 kilos de cannabis sativa ya dispuestos para la venta.
Mientras esto ocurría, los operarios de Endesa aprovecharon la seguridad que les ofrecía el despliegue de la Guardia Civil, que ha encuadrado esta actuación en la operación Miller, para desmantelar el enganche ilegal a la red eléctrica descubierto.