CÓRDOBA 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los autocares dedicados al transporte de escolares en Córdoba son objeto de vigilancia desde este viernes, y hasta el próximo 2 de diciembre, por parte de los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, dentro de las campañas de seguridad vial que anualmente realiza la Dirección General de Tráfico (DGT) para prevenir la accidentalidad en este tipo de transporte.
Según ha indicado la DGT en una nota, cada día, en torno a 10.000 niños utilizan el autobús escolar para ir al colegio y volver a casa. Un medio de transporte seguro, tal y como muestran las cifras de siniestralidad vial, pero que debido a la vulnerabilidad de sus pasajeros y a las vías por las que suele circular, en su mayoría carreteras convencionales, necesita de una especial vigilancia.
Por este movito, ñas inspecciones que realizan los agentes consisten en un primer control de carácter administrativo sobre las autorizaciones y documentos que deben tener dichos vehículos para la correcta prestación del servicio. También verifican que las condiciones técnicas y elementos de seguridad del vehículo son los que exige la normativa, así como los requisitos especiales que debe cumplir el propio conductor, como son el permiso de conducción, los tiempos de conducción y descanso.
Además, los agentes controlan que los conductores circulen a la velocidad permitida y que no hagan uso del teléfono móvil u otros aparatos que supongan distracción ya que ambos factores, velocidad y distracción, son las principales causas de los accidentes en los que están implicados este tipo de vehículos.
Como es habitual en este tipo de campañas, también se ha invitado a los municipios de la provincia a sumarse a la misma, de modo que la vigilancia de este tipo de transporte sea tanto en zona urbana como en interurbana.
EL CINTURÓN DE SEGURIDAD
Entre 2011 y 2015, en la provincia de Córdoba, los autobuses escolares se vieron implicados en seis accidentes, en los que no falleció ninguna persona aunque seis ocupantes resultaron heridos. Por la importancia que tiene este dispositivo de seguridad en caso de accidente, se presta especial atención al uso del cinturón de seguridad en aquellos autobuses escolares que los tengan instalados.
Según diversos estudios el uso de un sistema de seguridad en autobuses reduce las lesiones mortales en un 90 por ciento en caso de choque frontal o vuelco, ya que correctamente abrochado evita la proyección del pasajero (adulto o niño) y reduce los impactos en el pecho, abdomen y piernas. Desde octubre de 2007 se deniega la matriculación a cualquier autobús que no lleve instalados estos sistemas de retención.