Susana Díaz, este jueves en el Parlamento
EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 16 noviembre 2017 12:15

SEVILLA 16 Nov. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha acusado este jueves al líder de Podemos, Pablo Iglesias, de querer volver en España a la fórmula en la que había "tres autonomías de primera" y luego estaban el resto, precisamente un modelo que "rompió" el 4 de diciembre de 1977 cuando los andaluces salieron a la calle para reclamar autogobierno e igualdad y que culminó con el referéndum del 28 de febrero de 1980.

"Estoy en absoluto desacuerdo con lo que ayer dijo Iglesias y estaré en descuerdo lo diga quien lo diga", ha sentenciado la presidenta durante su intervención de cierre en el Debate sobre el Estado de la Comunidad celebrado en el Parlamento andaluz. Díaz se ha referido al hecho de que el líder de Podemos afirmara ayer que en nuestro país existen "cuatro nacionalidades que comparten estado", en concreto la española, la catalana, la vasca y la gallega.

Tras estas manifestaciones de Iglesias, la presidenta ha insistido en preguntar a Podemos Andalucía si comparte "el disparate de ese modelo territorial" que defiende el líder nacional. "Cuando levantamos la sesión en el Parlamento, el señor Iglesias, por si algunos aquí en su confluencia no lo habían oído, volvió a reiterar la posición para que quede claro el camino que van recorrer juntos quienes andan en ese disparate", ha apuntado la presidenta.

La presidenta ha manifestado que, durante el debate, le hubiera gustado "una mayor claridad" por parte de algunos grupos, en referencia a Podemos, sobre la cuestión territorial, apuntando que quedó absolutamente clara la posición de su Gobierno en el sentido de que Andalucía tenga un "papel protagonista" en este debate, totalmente coherente con el legado del 4D y 28F, que tenemos que preservar.

Ha señalado que sobre este asunto, durante el debate, todos "nos cruzamos algunas expresiones gruesas en la Cámara, pero que si ella ofendió a alguien, pide disculpas porque nunca es su intención. No obstante, ha expresado que sintió un "gran bochorno y vergüenza" cuando el portavoz de IULV-CA, Antonio Maíllo, se "permitió dar la bienvenida al 4 de diciembre como si fuera su casa". Para la presidenta, "intentar patrimonializar los símbolos de esta tierra es una falta de respeto a nuestra autonomía" y ha apuntado que los "símbolos de esta tierra son de todos los andaluces".

Susana Díaz ha señalado que ante un asunto tan trascendente como la cuestión territorial no caben "ropajes ni disfraces ni ponerse de perfil ni silencios tácticos" y ha querido dejar claro que ella está absolutamente en contra del derecho a decidir, porque supone en la práctica que "sobre aspectos que nos afectan a todos, decidan algunos mientras otros nos quedamos mirando".

Ha agregado que si aceptáramos que una comunidad tenga el derecho a decidir si rompe España, con mucha más naturalidad también se tendría que aceptar que decida cuánto aporta al conjunto del estado. "Estoy radicalmente en contra de eso", ha sentenciado la presidenta, para quien el sistema de financiación, la convergencia regional y la reforma de la Constitución se tiene que acordar entre todos los españoles y ahí Andalucía tiene que tener un "papel activo y protagonista".

Asimismo, la presidenta ha echado en falta que los partidos políticos de la oposición se posicionen en relación con la financiación autonómica y les ha pedido que "maduren su posición", apuntando que ella sí está dispuesta a "librar la batalla en defensa de Andalucía donde haga falta", porque esta tierra lo necesita y merece.

Susana Díaz ha insistido en su intervención de cierre del debate sobre el estado de la comunidad en poner en valor la estabilidad que tiene hoy Andalucía, fruto de la amplia mayoría que logró el PSOE-A en las pasadas elecciones autonómicas y de la voluntad de acuerdo de Ciudadanos.

Ha agregado que el PSOE-A está dando ejemplo de que es un gran motor de acuerdos en Andalucía y que siempre tenderá la mano a quien quiera entendimiento y diálogo, porque los socialistas siempre anteponen los intereses de Andalucía a cualquier otro interés. Ha señalado que el PSOE-A ocupa la centralidad política de Andalucía, lo que no es sinónimo de ocupar el centro, sino que se ubica más bien a la izquierda, como el corazón en los seres humanos.