JAÉN, 10 May. (EUROPA PRESS) -
La secretaria general de Podemos en Jaén capital, Trinidad Ortega, ha presentado su dimisión irrevocable y lo ha hecho a través de una carta en la que expone su pérdida de ilusión y el desmoronamiento de los principios que impulsaron en su día la puesta en marcha del proyecto político de Podemos, al tiempo que pone en evidencia su falta de sintonía, entre otros, con Teresa Rodríguez a la que acusa de haberla situado en "una lista negra".
"Este edificio de principios se ha ido desmoronando y aquello en lo que puse mis esperanzas y mi esfuerzo se ha ido poco a poco desvirtuando, dejando a la luz algo totalmente diferente", recoge la carta remitida a Europa Press.
Recuerda en su escrito remitido a los órganos de Podemos que en enero de 2015, "tras una dura y sucia batalla contra la lista que yo encabezaba en las primarias para ocupar la Secretaría General y el Consejo Ciudadano de la capital, empezó una pesadilla de insultos, difamaciones, peticiones de dimisión continuas, violencia y agresiones verbales".
Atribuye dicha campaña de descalificaciones a que "quienes perdieron esas primarias nunca lo asumieron, constituyendo su principal objetivo político forzarme a la dimisión a toda costa". En este objetivo en el que "han hecho lo indecible burlando dichos documentos y saltándose todas las normas con el apoyo de los que hoy nos representan en el Consejo Ciudadano Andaluz, Teresa Rodríguez y Jesús Rodríguez".
Añade haberse sentido "acosada hasta el punto de denunciar la situación a la Policía Nacional, a la Organización del partido y a la inoperante Comisión de Garantías Democráticas de Podemos en reiteradas ocasiones, sin obtener ninguna respuesta por parte de ésta en ningún momento".
Recoge también que el haberse posicionado en alguna ocasión sobre cuestiones que afectaban a la provincia y a Jaén capital, ha llevado a que "la secretaria general en Andalucía, Teresa Rodríguez, me coloque en la lista negra y salga a los medios a desmentirme y deslegitimarme publicamente, todo ello instado por el consejero ciudadano David Peñafuerte".
Apunta que entró en Podemos por "la honestidad, la ética y el compromiso con la gente corriente" y se creyó todo lo que le contaron pero "todo es mentira, porque a la hora de poner en práctica los documentos Organizativo, Político y Ético de Podemos se los saltan a la torera, son papel mojado para ellos.
Lamenta que haya miembros de la Comisión de Garantías que le han recordado que le debe "obediencia a las decisiones del partido sean las que sean, como si fuera yo quien se pone frente al partido, cuando en realidad son ellos los que no respetan los documentos aprobados por la mayoría de los inscritos, son ellos los que continuamente los incumplen y los ningunean".
Finaliza apuntando que entró en Podemos para contribuir a "cambiar las cosas desde la ética, la honestidad y la democracia real", pero "no para acatar decisiones contrarias a dichos principios y opuestas a los preceptos que defienden los Estatutos del Partido, por ahí no pienso pasar por el aro.
Para Ortega, formar parte de un partido "no es, ni debe ser equiparable al régimen de una institución militar", al tiempo que subraya que "la obediencia a las normas del partido se les presupone a los que nos dirigen y no el que las obvien y las cambien continuamente porque no les interesa".