Durán aboga por "la política de los acuerdos" frente a la de "enfrentamientos estériles"

Actualizado: lunes, 4 julio 2016 13:51

GRANADA 4 Jul. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Parlamento andaluz, el socialista Juan Pablo Durán, ha destacado este lunes que, para resolver los problemas de forma conjunta en una sociedad democrática, hay que buscar el consenso y los puntos de encuentro anteponiendo el interés general, abogando por "la nueva política de los acuerdos frente a la vieja política, la de los enfrentamientos estériles".

Durante la inauguración de la XXVII edición del Curso de Verano de la UNED en Motril (Granada), Durán ha sostenido que no se trata solo de hablar de 'nueva o vieja política' "porque no hay política más antigua, ni peor, que la de los vetos y la nula vocación de entendimiento", pues la cuestión a su juicio es "si se hacen bien o mal las cosas pensando en los ciudadanos, y para ello, debe ser fundamental el diálogo y el consenso entre las distintas fuerzas políticas y que el eje de los debates y propuestas sea la ciudadanía".

En este contexto, ha hecho un llamamiento a toda la representación política de Andalucía, para seguir dando pasos en esta Legislatura en la senda del progreso y el bienestar de nuestra región, y, para ello, ha dicho, "nuestra mirada, nuestro pensamiento y nuestra acción debe ser mejorar las condiciones de vida de los andaluces".

Durán, que ha comenzado la conferencia inaugural haciendo referencia a la conferencia que pronunció Ortega y Gasset en 1914 titulada 'Vieja y nueva Política', ha señalado que pese a que el sistema político y social ha entrado en "una espiral de descrédito y desconfianza", la inmensa mayoría tiene razones fundadas para seguir creyendo en la política.

El presidente del Parlamento andaluz afirma no estar de acuerdo con quien enarbola la bandera para identificarse con lo "nuevo" desprestigiando lo conseguido en estos años de democracia en España y en Andalucía. "A los que propugnan un proceso de ruptura hacia el vacío", les recordó que, mediante el acuerdo y el consenso de las diferentes fuerzas políticas, se logró diseñar un marco de convivencia, derechos y libertades para la ciudadanía que ha supuesto uno de los pilares fundamentales para la instauración de la democracia en nuestro país, y para alcanzar los avances necesarios para el desarrollo económico y de nuestro Estado del Bienestar.

Así, y partiendo de que nuestro sistema parlamentario tiene el desacuerdo como origen, indicó que el Estatuto de Autonomía declara que el Parlamento representa al pueblo andaluz, y en los escaños del antiguo Hospital de las Cinco Llagas se sientan diputados de diferentes grupos políticos, lo que implica "diversidad" de ideas, de puntos de vista y "diferencias" de criterio sobre los asuntos que afectan a los andaluces, y se preguntó "¿cuál es la tarea que tenemos como representantes de los ciudadanos para conseguir que las ideas se conviertan en realidades como decía Ortega y Gasset?".

En este sentido, señaló que para materializar las ideas siguiendo los cauces parlamentarios, no queda otra que llegar a acuerdos y pactos, que tienen que ver con paz y en los que no se trata de que uno gane y que otro pierda, sino comprometerse por una sociedad de igualdad de oportunidades, donde no se deje que nadie caiga.

Ha puesto como ejemplo de acuerdos el Estatuto de Autonomía andaluz, que es de los más avanzados en España en materia de derechos sociales e igualdad entre otros asuntos.

REFORMAS PARA IMPULSAR A LA CIUDADANÍA ESPAÑOLA

Así, se ha referido al debate abierto sobre la Reforma Constitucional 38 años después del nacimiento de Carta Magna y ha abogado por afrontar los cambios en nuestra sociedad como la entrada de España en Europa, las consecuencias de la crisis económica, y la solución a las tensiones territoriales, desde la actualización del texto constitucional pero "sin hacer un borrón y cuenta" nueva del texto de 1978, sino introduciendo elementos que vuelvan a impulsar a la ciudadanía española hacia la senda de la modernización, el bienestar y el progreso.

Entre las tareas a reformar, apuntó el fortalecimiento y blindaje de derechos sociales, con una referencia en la constitucionalización de los derechos, lo hecho en Andalucía; o la inclusión de un nuevo pacto territorial que aborde la reforma del Senado o la delimitación más concreta y exacta de la financiación en relación con la población de las autonomías así como de sus competencias.

En cuanto a cómo se debe hacer, dejó claro que el método debe ser el consenso necesario entre todas las fuerzas políticas frente al inmovilismo o el bloqueo permanente. Asimismo, subrayó el papel de Andalucía en este proceso, y se mostró convencido de que su voz se oirá en el conjunto del Estado para adaptar la Constitución a un nuevo tiempo, porque el objetivo no debe ser otro que el de diseñar entre todos un modelo de país para los próximos años, en el que, el conjunto de los españoles se sientan cómodos y añadió que lograr entre todos un nuevo marco constitucional marcaría un logro histórico y serviría para recuperar la imagen y la confianza de la ciudadanía en la política.

En cuanto a la calidad democrática, destacó que para generar confianza es necesaria la eficacia en la gestión, más transparencia, avances en democracia, y ante la corrupción, intransigencia. Ante el malestar social y la insatisfacción ciudadana con la política, sólo cabe un tratamiento: más y mejor democracia y afirmó que en el Parlamento de Andalucía se han dado pasos importantes en transparencia y participación, como muestra de una mayor autoexigencia de los representantes ante los representados.

Como ejemplos citó el portal de la transparencia, que sirve para que la ciudadanía pueda tener la información precisa del trabajo de los diputados y diputadas, sus retribuciones y declaraciones, sus agendas políticas, los contratos del Parlamento y todo lo referente a los servicios administrativos de la Cámara, además de la información detallada sobre el Presupuesto del Parlamento y su liquidación, y la posibilidad que tienen los ciudadanos de presentar iniciativas legislativas populares y de intervenir para defenderlas, ya sea en pleno o en comisión, a través del llamado Escaño 110, una medida pionera en España.