SEVILLA 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Cátedra de Investigación en Hepatología de la Sociedad Andaluza de Patología Digestiva, la Universidad de Sevilla y Gilead Sciences, han organizado la jornada 'Estrategias para la eliminación de la hepatitis C en tiempos de Covid-19', ya que dentro de uno de sus objetivos fundacionales está apoyar la eliminación de la hepatitis C a través de un abordaje multidisciplinar y con la colaboración de todas las partes implicadas, desde las asociaciones de pacientes hasta las sociedades científicas y las instituciones.
A lo largo del encuentro, que ha contado con especialistas en enfermedades hepáticas y distintos representantes institucionales andaluces, se han analizado las barreras y necesidades, así como las oportunidades y posibles soluciones para alcanzar esta finalidad en la práctica clínica en Andalucía, más en el contexto posterior a la pandemia generada por el Covid-19.
Según un comunicado de Gilead, la vicepresidenta y directora general de Gilead, María Río, ha querido destacar los impresionantes resultados en salud conseguidos en los últimos cinco años con la introducción de los Antivirales de Acción Directa. No menos importancia ha tenido la "ejemplar" colaboración entre los profesionales sanitarios, las administraciones públicas, los pacientes y la industria farmacéutica, guiados por el Plan Nacional para el abordaje de la hepatitis C.
Espera que ese mismo espíritu "siga ayudando a hacer frente" a los retos que todavía tiene esta enfermedad, como es el diagnóstico y la derivación de todos aquellos portadores del virus que aún no han sido detectados, lo que "supondrá un gran avance en el objetivo de conseguir la eliminación de la Hepatitis C, que es la mejor ayuda que podemos prestar a los pacientes.
La primera mesa redonda celebrada en la jornada ha abordado la búsqueda activa de pacientes en cuatro áreas concretas: atención primaria, hospitalaria, centros de tratamiento de adicciones y prisiones. Según el doctor Manuel Romero, director de la Cátedra, "hay pacientes que nunca se han hecho una serología de virus C, pero están contagiados. Tenemos que trabajar con atención primaria para que los médicos se conciencien, tengan la hepatitis C en su listado de problemas y pongan en marcha estrategias de búsqueda activa.
Además, hay otro grupo importante de pacientes al que llamamos 'pacientes perdidos en el sistema', que son personas que sí han sido diagnosticadas de hepatitis C pero que han desaparecido de las consultas por diferentes motivos personales, sociales, familiares, económicos, etcétera a los que también debemos localizar y tratar".
Expone que la crisis sanitaria actual ha impactado en la práctica clínica diaria y los servicios de microbiología se han visto "sobrecargados de trabajo". Aun así, "todas las situaciones difíciles crean oportunidades", y por ello, a lo largo del acto, se ha abordado la posibilidad de hacer test rápidos de hepatitis C a la vez que se hacen de SARS Cov-2 en sangre capilar. De esta forma, se aprovecharía la concienciación actual de la población con la salud y el Covid-19 para detectar posibles nuevos casos de hepatitis C.
Además, señala que en el caso particular de Andalucía, actualmente se está trabajando en la actualidad en el análisis de la base de datos poblacional de esta comunidad autónoma --que contiene numerosos de datos de salud-- por si pudiera ser una buena fuente para la detección de nuevos casos. Todo ello bajo la premisa de que cada paciente identificado es una persona a la que se le va a mejorar el diagnóstico y la calidad de vida.
Por otro lado, apunta que durante la jornada se ha analizado otro de los focos donde se encuentran pacientes con hepatitis C, los centros de tratamiento de adicciones (CTA). Allí acuden personas adictas a drogas por vía parenteral o no parenteral que están en proceso de deshabituación y que reciben su dosis de tratamiento con metadona. Es un colectivo que, normalmente, no está en contacto con el sistema sanitario y es complicado incorporarle al mismo.
Por ello, en estos momentos "se está estudiando en los CTA de polígono Sur, de Torreblanca y Coria si los pacientes que atienden tienen el virus" y en caso afirmativo, los ponentes han coincidido en que habría que hacerles el diagnóstico y tratamiento en un solo paso. Debido a la dificultad existente a la hora de conseguir que esta población vulnerable se acerque al sistema, los expertos han destacado que hay que lograr que el día que acuden se les diagnostique la enfermedad y se les prescriba directamente el tratamiento.
Además, los ponentes han abordado la situación en los centros penitenciarios, otra de las áreas donde se encuentran pacientes con virus C. Al estar los reclusos en la cárcel, se facilita el tratamiento y cumplimiento de este y, a pesar de las posibles dificultades, es un modelo de éxito en nuestro país.
Por último, en la conferencia de clausura se ha explicado que se van a poner en marcha diferentes programas de abordaje local de la hepatitis C en diferentes ciudades españolas. Se comenzará con la estrategia de 'Sevilla sin hepatitis C', en la que participarán todos los agentes sociales y estará liderada por el Ayuntamiento de la ciudad y la Universidad de Sevilla. Esta iniciativa pretende lograr la eliminación de la hepatitis C en dos o tres años en la ciudad y, además, es parte de las estrategias de microeliminación que se están llevando a cabo en nuestro país.
"El esfuerzo que queda por hacer es ínfimo con respecto a lo que ya se ha hecho. Ahora es momento de actuar de forma local e ir hacia donde está el problema. Avanzar de la mano de los agentes sociales y asociaciones de pacientes nos facilita el acercamiento a esta población", ha concluido el doctor Manuel Romero.
La jornada 'Estrategias para la eliminación de la hepatitis C en tiempos de Covid-19' ha sido inaugurada por el director general de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Consejería de Salud y Familias, José María de Torres; el vicerrector de Transferencia del Conocimiento de la Universidad de Sevilla, José Guadix; el director Gerente del Hospital Virgen del Rocío, Manuel Molina; la vicepresidenta y directora General de Gilead Sciences, María Río; el director del Departamento de Medicina de la Universidad de Sevilla, Julián Sánchez Conejo-Mir; la presidenta de la Sociedad Andaluza de Patología Digestiva, Ángeles Pérez; y Manuel Romero, director de la Cátedra.
Además, ha contado con la participación de José Luis Calleja, del Hospital Puerta de Hierro de Madrid; Raúl J. Andrade, presidente Asociación Española para el Estudio del Hígado; Francisco Atienza, del Distrito Sevilla de Atención Primaria; Eduardo Briones Pérez de la Blanca, del Servicio de Epidemiología del Distrito Sevilla de Atención Primaria; María Fernanda Guerra, del Hospital Virgen Macarena de Sevilla; María Ángeles Rodríguez, del Centro Provincial de Drogodependencias de Sevilla; Edmundo Cartagena, del Centro de Tratamiento de Adicciones del Polígono Sur de Sevilla; y Rosa María Jiménez, del Centro Penitenciario Sevilla 1.
También han estado Eva Pérez Bech, presidenta de la Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos; Marta Casado Martín, del Hospital Torrecárdenas de Almería; Federico García, del Hospital Clínico San Cecilio de Granada; Javier Ampuero, del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla; Ramón Morillo, del Hospital de Valme de Sevilla; José Aguilar Reina, Facultativo Emérito del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla; Lourdes Grande, del Hospital de Valme de Sevilla; y Juan Manuel Flores, teniente de alcalde y delegado del Área de Bienestar Social, Empleo y Planes Integrales de Transformación Social del Ayuntamiento de Sevilla.