SEVILLA 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
La organización de consumidores Facua Andalucía considera "absolutamente ridículas" las partidas del presupuesto que la Junta pretende aprobar para la lucha contra los fraudes y la protección de los consumidores para 2017, tras lo que considera que "ante una caída del 3,3 por ciento de la partida destinada a este fin", la federación valora que "seguirán aumentando los desequilibrios y abusos de las empresas".
Facua ha explicado en una nota que la presidenta de Facua Andalucía, Olga Ruiz Legido, ha comparecido este lunes ante la Comisión de Hacienda y Administración Pública del Parlamento de Andalucía para presentar las valoraciones de la federación como parte del proceso de aprobación del Proyecto de Ley del Presupuesto de la Comunidad Autónoma de Andalucía para 2017.
"Si ya era precario el presupuesto en estos años, el de 2017, con la reducción del 3,3 por ciento, no permitirá mejorar la protección de los consumidores", ha indicado Ruiz, quien lamenta que "no destina más recursos ni tan siquiera a mejorar la acción administrativa, ni tampoco para reforzar el papel de las organizaciones de consumidores".
Además, considera que "son unos pobres presupuestos para unos pobres objetivos en materia de protección al consumidor, que no reflejan ni tan siquiera la voluntad política de avanzar, de dar, aunque sea pequeño, un paso cualitativo en la protección de los consumidores en Andalucía".
El programa específico de consumo presenta una dotación presupuestaria para 2017 de 14.714.423 euros, esto es, un 3,3 por ciento menos que en 2016. No recupera, por tanto, los niveles anteriores a la crisis, dado que no iguala ni siquiera la partida presupuestaria de 2009.
"Andalucía se encuentra en estos momentos sin auténticas políticas públicas de protección a los consumidores. Carece de modelo, carece de planificación y operativa y sobre todo carece de recursos para abordar una tarea que cada vez es más ardua y compleja y que está contribuyendo a que la brecha de la desigualdad sea cada vez mayor", ha añadido la presidenta de Facua Andalucía en su comparecencia.
A juicio de la federación, la caída del presupuesto "hará que se profundice en la tendencia que se viene produciendo en los últimos años: incremento de los fraudes, incrementos del desequilibrio entre el poder económico y los consumidores y la generación de más pobreza y exclusión". "Los fraudes y abusos sacuden con fuerza a los más débiles y vulnerables y son ellos quienes están más desprotegidos", ha recordado Ruiz.
"La desprotección de los consumidores se ha convertido en un factor clave de nuestro sistema económico como instrumento al servicio del beneficio o la propia continuidad de las empresas, y como factor resultante del retroceso de administraciones y gobiernos. No es casual, por tanto, la judicialización cada vez mayor de los conflictos de consumo", ha valorado Ruiz.
Frente a la "raquítica" partida presupuestaria prevista por la Junta para 2017 y ante la "falta de acción real en la protección de los consumidores", Facua Andalucía ha detallado en su comparecencia una serie de propuestas para paliar la situación actual, que pasan por "un aumento de la partida destinada a este fin, pero también, por el refuerzo del control que se ejerce sobre el mercado, con un mayor número de inspecciones y de tramitaciones de expedientes sancionadores a la empresas incumplidoras".
La federación considera que "se debe mejorar, revisar y actualizar el procedimiento y régimen sancionador y sus cuantías, de tal manera que se garantice que las sanciones impuestas cumplan su función disuasoria frente a las conductas que atentan contra los derechos de los consumidores". "Las sanciones, además, deben de cobrarse (dado que en muchos casos no ocurre en la actualidad) y contribuir a reforzar las políticas de protección de los consumidores", ha agregado.
Asimismo, cree que es prioritario que "se garanticen los suministros básicos, como el agua o el suministro eléctrico, especialmente en el caso de las familias más vulnerables, desde el reconocimiento de derechos y no desde el asistencialismo".
Facua cree que "también es fundamental "impulsar y revitalizar los órganos de participación social, con dotación de recursos suficientes para permitir un seguimiento y control real de la ejecución de las políticas públicas y un mayor reconocimiento al movimiento consumerista, que contribuya en mayor medida a poner freno a los abusos".