El IAM condena el nuevo asesinato machista de Las Gabias (Granada) y pide la aprobación "inmediata" del Pacto de Estado

SEVILLA 13 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) ha manifestado este martes su repulsa ante el delito machista de un agresor que presuntamente ha asesinado a su pareja en Las Gabias (Granada), en un nuevo caso de violencia de género que, de confirmarse, elevará a cinco el número de agresiones mortales por violencia machista en lo que va de año en Andalucía (4 mujeres y un menor) y 34 en España (28 mujeres y 6 menores).

"Es inconcebible que en pleno siglo XXI una sociedad de derechos sufra este terrorismo machista", ha señalado hoy la directora del IAM, Elena Ruiz, quien ha pedido a toda la ciudadanía que colabore con las autoridades "llamando a los recursos públicos ante cualquier señal de violencia de género que se detecte en su entorno". (Teléfono de Información a la Mujer 900 20 0999 o Teléfono 016).

La directora ha pedido una vez más que el Gobierno central apruebe "de manera inmediata" el Pacto de Estado para la Erradicación de la Violencia contra las Mujeres, cuya propuesta andaluza contempla iniciativas urgentes como la consideración de esta lacra como un tipo de terrorismo, con todas las medidas que ello conlleva.

Asimismo, Ruiz ha recordado que la Organización Mundial de la Salud reconoce la violencia machista, que sufre un tercio de las mujeres de todo el mundo, como un problema social de magnitudes epidémicas, que tiene su base en la desigualdad de género. Por ello, ha abogado por promover "la tolerancia cero" ante el machismo y la desigualdad de género estructural que perpetúan este delito.

Ruiz ha querido también llamar la atención a los "potenciales maltratadores", para advertirles de que la violencia física, sexual, psicológica y económica contra las mujeres es un delito y un grave atentado contra los derechos humanos, "ante el cual les caerá todo el peso de la ley".

Asimismo, les ha recordado que la violencia de género es "un proceso progresivo" que ellos mismos pueden frenar si están atentos a "esos primeros síntomas del maltrato que su propia cultura machista enmascara de normalidad".