SEVILLA, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Educación y Deporte, Javier Imbroda, ha asegurado este miércoles durante una comparencia parlamentaria sobre la implantación del llamado pin parental que "no voy a sucumbir a imposiciones ideológicas de ningún tipo, vengan de donde vengan" tras argumentar que "defiendo la despolitización de la educación".
El PSOE le ha reprochado, por medio de la parlamentaria Beatriz Rubiño, "la implantación del veto parental que ha convertido en rehenes a los niños", y ha anunciado que "vamos a impulsar que el Ministerio de Educación presente un recurso", al igual que sucedió con la Comunidad de Murcia.
Imbroda ha comparecido ante el Pleno del Parlamento de Andalucía, a petición del PSOE, para informar de los cambios normativos asociados a la implantación de la autorización paterna para las actividades escolares complementarias, que firmó el 10 de febrero con el portavoz parlamentario de Vox, Alejandro Hernández.
El consejero de Educación, que ha asegurado que "este tipo de debates no ayudan a la educación con mayúsculas", ha esgrimido que se trata de "un trabajo público y transparente" en referencia a la llamada primera reunión técnica que mantuvo su departamento con Vox el 4 de marzo.
Imbroda, que ha apelado a "equilibrar la libertad de cátedra con la información a las familias", ha asegurado que el trabajo de la Consejería se sustenta en "tres premisas incuestionables: el cumplimiento del compromiso adquirido; la confianza del Gobierno en la profesionalidad de los docentes y avanzar en que las familias eduquen a sus hijos en libertad, con un conocimiento previo del modelo educativo".
"Acatamos el marco jurídico básico", ha esgrimido Imbroda, quien ha aseverado que "hay margen de mejora en la organización y la comunicación de actividades".
En su relato de "un sistema transparente" sobre las actividades escolares, Imbroda ha apelado a "garantizar la seguridad jurídica; la transparecencia del proyecto del centro aprobado por el Consejo Escolar; y a intensificar la comunicación con las familias para que conozcan las actividades, que deben supervisar los servicios de Inspección".
El consejero de Educación, que ha afirmado que "hace un año, en febrero de 2020, se dio un giro importante en la normativa de escolarización del alumnado con la información a las familias para escoger centro con conocimiento de la educación para sus hijos", ha sostenido que existen tres filtros sobre el proyecto educativo de las actividades complementarias, que pasan por "el equipo de dirección, el claustro y el Consejo Escolar".
Imbroda ha señalado que "el próximo curso habrá información individualizada a todas las familias", al tiempo que ha avanzado que en abril habrá una versión de la aplicación Ipasen, a través de la cual los centros educativos se comunican con las familias, para que haya "una mejor comunicación de las actividades complementarias".
El consejero ha identificado como objetivos sobre las actividades complementarias "analizar las posibles normativas sobre el marco de autonomía de los centros con un respeto absoluto del marco vigente; la comunicación a las familias con detalle y tiempo; que todas las actividades estén vinculadas al currículum; que las actividades complementarias se hagan con un docente presente en el aula; y reforzar los mecanismos de supervisión de las actividades".
Como cierre de conclusiones de sus aspiraciones con la autorización paterna de las actividades escolares complementarias, Imbroda ha apuntado a "armonizar la formación, la defensa de la absoluta autoridad del profesorado, la información a las familias, y el siempre estricto cumplimiento de los principios legales y constitucionales".
PSOE: UN PRESIDENTE INDOLENTE PARA SOSTENER EL SILLÓN DE SAN TELMO
La parlamentaria socialista Beatriz Rubiño, en su retrato de la implantación de lo que ha descrito como "el veto parental", ha acusado "al Gobierno de la Junta de ser cobarde", a lo que ha sumado "un presidente indolente que trata de sostener el sillón de San Telmo", mientras ha identificado como consecuencia a "los niños convertidos en rehenes, en monedas de cambio para seguir gobernando".
Rubiño, que ha lamentado "los malabres para no llamar a las cosas por su nombre: veto parental", ha caracterizado el acuerdo alcanzado entre Imbroda y Vox "a escondidas, detrás de las cortinas", mientras que ha recriminado a Ciudadanos pasar de que "no querer gobernar con la extrema derecha, de no poner su logo junto a Vox, a hacerlo en los acuerdos de Presupuesto, y pasar la vergüenza de que insulta a la Presidencia de esta Cámara", en referencia al incidente que protagonizó Alejandro Hernández con la presidenta del Parlamento, Marta Bosquet.
"Al presidente de la Junta le tiemblan las piernas y cae de espaldas", ha afirmado Rubiño, quien ha puesto el acento en "las caritas de esta jornada intentando explicar que el acuerdo goza de buena salud", en referencia a la comparecencia conjunta de Juanma Moreno y Juan Marín, para poner de manifiesto la continuidad de su pacto de gobierno tras la moción de censura en Murcia y la ruptura en la Comunidad de Madrid.
"Este presidente no se merece dirigir la Junta de Andalucía", ha afirmado.
Rubiño se ha preguntado si el presidente de la Junta es consciente de que el veto parental afecta a actividades educativas "obligatorias, evaluables y que se desarrollan en horario lectivo, como lo son las Matemáticas y la Lengua. Y si lo sabe y aún así se arrodilla ante Vox es que es un simple mercader", ha recalcado.
Ha acusado a Moreno Bonilla de disponerse a aplicar el veto parental "o censura educativa previa" con esa "solicitud dirigida a las direcciones de los centros educativos para que informen previamente, a través de una autorización expresa, sobre cualquier materia, charla, taller o actividad", que afecte a lo que Vox describe como "cuestiones morales socialmente controvertidas".
La representante socialista ha rechazado los "juegos malabares, casi de ingeniería lingüística" de Imbroda "para no llamar a las cosas por su nombre".
Rubiño ha insistido en que el veto parental es "censura educativa previa" y "no es sólo una amenaza de Vox al Gobierno de PP y Cs, sino que es una amenaza democrática", advirtiendo de que "pretenden ilegítimamente limitar la competencia de la administración en la programación general de la enseñanza y la determinación del currículo".
La portavoz socialista de Educación ha trasaldado que la medida "no tiene amparo alguno en el ordenamiento jurídico que rige el sistema educativo español" y atenta contra la Constitución.
La representante socialista ha alertado al titular de Educación y a Cs de que se encaminan a ser "fagocitados electoralmente por Vox".
IMBRODA: NO TIENEN EL MONOPOLIO DE LA EDUCACIÓN EN VALORES
El consejero de Educación, en sus réplicas a la portavoz socialista, ha asegurado que "no tienen el monopolio de la educación en valores, qué se creen que son" y ha reconocido que "hemos avanzado en el calendario de trabajo con Vox" para preguntarse que "no se concibe que a su grupo les moleste tanto el acuerdo con un grupo democrático que es un paso más en la transparencia del sistema educativo".
"No hay pacto oculto", ha proclamado Imbroda, quien ha proseguido afirmando que "no hay conspiración, les va ese ruido y generan problemas donde no los hay".
Imbroda, que ha reprochado al PSOE su concepción de "la educación como herramienta ideológica para mantenerse en el poder", ha afirmado que "debo velar con que se cumplan con los cometidos que este Gobierno me ha encomendado".
"Voy a defender la cordura frente a prejuicios ideológicos vengan de donde vengan", ha señalado como cierre del debate.