SEVILLA 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno andaluz ha defendido este lunes que las medidas fiscales en que trabaja, entre ellas las deducciones en vivienda, que las hace con "precisión quirúrgica" por el hecho de que "el margen es cada vez menor" ante los cambios que ha ido acometiendo en tributos como Sucesiones y Donaciones o Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados.
La consejera de Economía, Hacienda, y Fondos Europeos y portavoz del Gobierno andaluz, Carolina España, ha esgrimido ese argumento en la rueda de prensa del Consejo de Gobierno, al que ha sumado, ante preguntas de los periodistas sobre la cifra de déficit con que se va a elaborar el proyecto de Presupuesto de 2025, la idea de que las cuentas andaluzas estarán aprobadas "en tiempo y forma" a final de este mes por el Consejo de Gobierno, pero con el matiz de fondo de "la incertidumbre que nos traslada el Gobierno sobre esa senda de déficit".
La suspensión de las reglas fiscales (techo de gasto, cifra de déficit y de deuda pública) se han levantado ya para el ejercicio 2025, una exigencia a la que se suma el hecho de que el Gobierno ha vuelto a ver como el Congreso de los Diputados le ha rechazado por segunda vez el techo de gasto del proyecto de Presupuestos Generales del Estado.
En este sentido España ha argumentado que "cada vez es más complicado elaborar" las cuentas del próximo ejercicio antes de remarcar que "tenemos hasta final de mes para presentarlas".
En las cuentas en vigor, de este 2024, el Gobierno andaluz incluyó para su elaboración una cifra de déficit del 0,1%. En el Informe Económico-Financiero del Presupuesto argumentaba la Junta de Andalucía que se trataba de la cifra que incluía el Gobierno en el Plan Presupuestario remitido a la Unión Europea y por ello consignaba un endeudamiento de 201 millones para la financiación del déficit del ejercicio.
La consejera y portavoz ha calificado la hoja de ruta que ha seguido el Gobierno de Moreno desde enero de 2019 como "política de alivio fiscal", por lo que ha blandido el argumento de que "se ha dinamizado la economía", afirmación que ha sustentado en el dato del "aumento del número de declarantes", que ha cifrado en 576.000 nuevos declarantes en el IRPF, así como que hay "900 millones en el bolsillo de los andaluces", de los cuales 300 han sido para "favorecer el acceso a la vivienda".
"El problema que nos preocupa es el acceso a la vivienda", ha proclamado España, de ahí esa precisión quirúrgica con la rebaja fiscal que ha apuntado, donde ha incluido que subirá de un 5% al 6% la bonificación en Transmisiones Patrimoniales por la adquisición de una vivienda habitual, de lo que ha dicho que pueda tener a 15.000 beneficiarios, o el incremento de la deducción en el alquiler de vivienda de 600 a 900 euros para grupos como personas con discapacidad, mujeres que sufren violencia de género o víctimas de violencia de género.