SEVILLA 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
El consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa del Gobierno andaluz, Antonio Sanz (PP-A), ha ofrecido este martes al Parlamento autonómico que se incorpore al Centro de Ciberseguridad de Andalucía para garantizar su seguridad digital.
Antonio Sanz ha realizado esta propuesta durante una comparecencia en la Ponencia para la reforma del Reglamento del Parlamento, donde ha defendido la necesidad, a su juicio, de adaptar dicho documento "al siglo XXI", y que "esté impregnado de transformación digital".
Así, el consejero ha propuesto un convenio entre el Parlamento y la Junta para que la Agencia Digital de Andalucía (ADA) preste sus servicios a la Cámara regional en cuestiones como infraestructuras tecnológicas o ciberseguridad, y al respecto ha puesto de relieve que "cada año recibimos más de 7.000 ataques cibernéticos en la Junta de Andalucía".
Antonio Sanz ha argumentado que "el Parlamento no puede vivir de espaldas a esta realidad", y "desde el Gobierno tendemos la mano para ese acuerdo que garantice la seguridad digital de la casa de los andaluces", ha proclamado.
Además, el consejero ha sostenido que "la revolución digital que debe contener el futuro Reglamento de la Cámara no debe quedarse solo en cuestiones de relativas a la seguridad o infraestructuras tecnológicas". En esa línea, ha manifestado que "no es de recibo que en pleno siglo XXI sigamos viendo esas ingentes cantidades de papel, o que las iniciativas deban ser selladas físicamente por los funcionarios de la casa a escasos minutos de que venzan los plazos".
Por ello, ha propuesto también la puesta en marcha de "una herramienta de compartición e intercambio de información entre los diputados de la Cámara y el Gobierno de la Junta de Andalucía mediante la Secretaría General de Relaciones con el Parlamento, siempre con un escrupuloso cumplimiento de las leyes vigentes".
El consejero ha precisado que "estaríamos hablando de entrada de un ahorro descomunal de papel, ya que el registro de iniciativas sería de forma telemática, por ejemplo". Y también ha explicado que, "al presentarse de forma remota, nos olvidaríamos del sellado arcaico y que supone un quebradero de cabeza para los trabajadores del Parlamento cuando se aproximan los plazos de vencimiento".
"INSTRUMENTO VIVO"
Antonio Sanz ha defendido igualmente que el Reglamento "debe ser un instrumento vivo que sea capaz de adaptarse al entorno en el que se encuentra y que, por ejemplo, sea capaz de trasponer acuerdos que tomen los miembros de la Mesa, que incorpore resoluciones internas".
También ha querido recalcar que "un concepto esencial que debe marcar la futura norma de esta casa es el de la eficiencia", y que "esta reforma debe contar con el mayor consenso posible de todos los grupos", a quienes ha felicitado por su "valentía" para acometer esta "reforma de tanto calado".
El consejero, que ha recordado al inicio de su intervención que también participó en la Ponencia para la Reforma del Estatuto de Autonomía en 2006, ha subrayado que "estamos hablando de un instrumento que sirve para aprobar normas con rango de ley" y que "regula la actividad de un órgano constitucional del Estado, órgano que es la expresión más directa de la democracia".
Antonio Sanz se ha referido también en su intervención a los tiempos de intervención de los debates parlamentarios, respecto de los que ha señalado que "muchas veces son verdaderamente innecesarios" los tiempos "tan elevados" que tiene tasada cada comparecencia, cuando se podrían traer "más iniciativas" si fueran más reducidos.
De igual modo, el consejero ha apostado por "avanzar en los plazos" para la tramitación de iniciativas, desde la premisa de que "la sociedad a veces no puede esperar plazos tan extensos que, a veces, entre unos trámites y otros, se extienden a meses y meses", y que provoca en ocasiones que, por la "urgencia de los temas" objeto de regulación, haya que optar desde el Gobierno por una figura como la de los decretos leyes que "no debe ser la normalidad".
PSOE-A: CONOCER LA DISPOSICIÓN DEL GOBIERNO PARA NO TRABAJAR EN BALDE
Tras la intervención inicial de Antonio Sanz, el diputado socialista Mario Jiménez ha cuestionado al consejero sobre "conocer la actitud real del Gobierno respecto a esta reforma, conocer su predisposición" para "no trabajar en balde", una vez que ha argumentado la prevalencia de los grupos en el diseño de la reforma del Reglamento del Parlamento, por lo que le ha agradecido "las recomendaciones desde el Gobierno, pero será la Cámara la que tome esas decisiones".
Convencido de que la modificación de la norma de gobierno de la Cámara "tiene que ser una reforma honesta, leal con esa separación de poderes", le ha reprochado a Sanz que "no ha hecho referencia a división de poderes, que tan importante es", al tiempo que ha blandido las ausencias de consejeros en el Pleno cuando "el calendario de sesiones se conoce con antelación", a lo que ha sumado como debe del Gobierno en el cumplimiento de sus deberes parlamentarios que "el presidente fue a ver a una autoridad religiosa", en referencia a la visita de Juanma Moreno al papa Francisco el pasado 21 de marzo, coincidiendo con una jornada de sesión plenaria en el Parlamento.
Mario Jiménez ha reclamado además la posibilidad de incluir la reprobación del Consejo de Gobierno por incumplir plazos parlamentarios de respuesta.
El portavoz adjunto del Grupo Popular, Pablo Venzal, ha recriminado a Jiménez el tono de su intervención por apreciar en ello estar "más dispuesto a debatir con usted que a escuchar", mientras que ha reivindicado que Sanz ha mostrado su "entera disposición" a comparecer las veces que fueran necesarias, a lo que ha sumado que como Grupo Popular "no tenemos directrices del Gobierno", y ha blandido en el haber de la Junta la propuesta del consejero de la Presidencia sobre "el compromiso de acortar plazos", además de que ha abogado por incluir en el futuro Reglamento un Título Preliminar o una referencia "al no sometimiento de los diputados".
El parlamentario de Vox Alejandro Hernández, quien ha instado a Mario Jiménez a "irse a Ferraz o a Moncloa" para que sus alusiones a la división de poderes "se lo explique a dirigentes de su partido" ante lo que ha descrito como "poco más menos el golpe de Estado que está atentando contra la legalidad del presidente Sánchez", ha preguntado a Sanz "si comparte usted el sentimiento 'sotto voce' de los diputados de limitar el tiempo y la capacidad de los partidos que sostienen al Gobierno de colmatar con iniciativas que no tienen nada que ver con el control del Gobierno, sino con el aplauso".
SANZ: "ABSOLUTA CONFIANZA" DEL GOBIERNO ANDALUZ EN EL PARLAMENTO
En su turno de cierre, Antonio Sanz ha querido dejar claro que el Parlamento "hará lo que tenga que hacer" en relación a las propuestas que ha lanzado sobre su incorporación a mecanismos para garantizar su seguridad digital, y ha acusado al diputado del PSOE-A Mario Jiménez de solicitar su comparecencia para "buscar la confrontación" con el Ejecutivo del PP-A.
De igual modo, ha defendido que el Gobierno andaluz tiene "absoluta confianza" tanto en el presidente como en la Mesa del Parlamento y en los grupos políticos, por lo que no tiene que dar "ninguna instrucción" a los grupos en torno a esta reforma del Reglamento a cuya iniciativa el Ejecutivo autonómico da un "sí claro", según ha sentenciado.