GRANADA 24 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de Primera Instancia número 3 de Granada ha fijado para el próximo miércoles 26 de julio la fecha en la que Juana Rivas, vecina de Maracena (Granada), deberá devolver a sus hijos de once y tres años para que residan en Italia con su padre, condenado en 2009 por maltratarla.
Así lo acuerda la jueza en una providencia fechada este lunes, a la que ha tenido acceso Europa Press, donde señala la entrega de los dos menores para las 16,30 horas del miércoles en el Punto de Encuentro Familiar de Granada, al que deberán ser llevados por la madre a fin de que sean entregados al progenitor y trasladados a Italia, donde tienen su "residencia habitual".
La jueza argumenta la decisión en la necesidad de "garantizar que la restitución de los menores se hace sin peligro", después de el padre presentara el pasado viernes un escrito en el Juzgado reclamando la ejecución de la sentencia en la que se acordaba esta medida y pidiendo medidas urgentes para ello, dado que la madre no los había entregado en el plazo previsto, después de que la Audiencia de Granada rechazara su recurso.
Ante la posibilidad de que la entrega de los menores sea "obstaculizada" por la madre, la jueza pide auxilio a la Unidad de Familia y Mujer del Cuerpo Nacional de Policía para que garanticen que se cumple el mandato judicial "adoptando las medidas administrativas precisas" y actuando no solo en la residencia de los menores en Maracena sino en aquellos lugares donde puedan encontrarse.
Contra esta resolución cabe recurso de reposición ante este mismo Juzgado, "no obstante lo cual, se llevará a efecto lo acordado", añade la providencia.
Esta decisión del Juzgado se produce pese a que aún no se ha resuelto el recurso que la abogada de Juana Rivas ha presentado ante el Supremo contra la sentencia que le obliga a devolver a sus hijos a su ex y que por tanto no es firme. Se trata de un requisito necesario para ordenar la ejecución de sentencia en los asuntos de familia, según ha precisado a Europa Press la directora del área de Igualdad del Ayuntamiento de Maracena y responsable del Centro de la Mujer de esa localidad, Francisca Granados.
Durante este tiempo, Juana Rivas ha reclamado a la Justicia que un equipo especializado reconozca a los menores y valore de nuevo su caso al atender que no se ha aplicado la normativa vigente en violencia de género ni las últimas reformas legales vinculadas al estatuto de la víctima. Alega que sus hijos no quieren regresar con su progenitor, especialmente el mayor, que lo ha expresado ante el Juzgado.
Rivas ha relatado en sus comparecencias públicas que "tuvo que escapar de la isla italiana Carloforte, en la que vivía con su expareja y padre de sus dos hijos" por estar "sometida a una situación insostenible de violencia psicológica y física". Según afirma, los menores "han sido testigos de todo ese dolor".
El padre ha utilizado el procedimiento de la Convención de La Haya que "estima sustracción ilícita de menores cuando se trasladan de un lugar a otro país sin el consentimiento o autorización de uno de los progenitores".
No obstante, los representantes legales de Juana Rivas afirman que "hay excepciones por riesgo importante a nivel psicológico o físico, así como por situación intolerable", además de que en España los niños "están amparados por la Ley de Protección del Menor que los ampara como víctimas también de estos malos tratos".