Ribera señala que el Estado asumiría el trasvase de desaladora a barco
SEVILLA, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha cifrado este jueves en cinco millones de euros mensuales el coste de transportar en barco agua desalada hacia puertos andaluces para el abastecimiento de las poblaciones andaluzas con mayores problemas con la sequía, como es el caso de la provincia de Málaga, por lo cual ha elevado hasta los 20 millones su gasto total para una previsión de cuatro meses, como mínimo los tres de verano.
Costes al margen, Moreno ha puesto de manifiesto que concibe el transporte de agua como "último recurso, un recurso límite"
Moreno ha deslizado esta cifra en la ronda de preguntas que se ha abierto a la conclusión del encuentro que ha celebrado esta jornada en el Palacio de San Telmo con la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en el marco de un encuentro para abordar el problema de la sequía y de las infraestructuras hídricas.
El presidente andaluz ha argumentado que esta cifra responde a "un tanteo que hacemos con los operadores", para seguidamente precisar que "puede ser un poquito más caro", aunque de igual forma ha remarcado que "no es exacta, puede ser flexible" por el hecho de que "depende de los acuerdos a los que finalmente lleguemos".
Moreno ha explicado que se trataría de tener "un barco al día" con la previsión de que puedan llevar 100.000 metros cúbicos de agua, aunque ha apuntado que no todo los barcos tiene la misma capacidad.
El presidente andaluz ha detallado que esa agua habría que llevar a una planta depuradora para después distribuirse por la red habitual, antes de expresar el deseo de que "ojalá que no tengamos que usarlo" aun cuando ha reconocido el trabajo de la Junta de Andalucía con los operadores navieros por cuanto se tratan de "barcos que son muy específicos", al tiempo que ha esgrimido las conversaciones con el Estado para precisar de qué desaladora se podría obtener el agua.
La vicpresidenta Ribera, sin identificar en ningún momento de qué desaladora procedería el agua que llegaría a Andalucía, por cuanto ha precisado que al tratarse de una infraestructura que no pertenecería a Acuamed (Aguas de las Cuencas Mediterráneas), empresa pública dependiente de su Ministerio, no pudiera ser más precisa, ha asegurado que el trabajo de su departamento en estos momentos se encamina a "identificar las desaladoras que no están a pleno rendimiento".
Ribera ha situado entre 60 y céntimos el metro cúbico el coste de desalar el agua, que "esa parte la estaría cubriendo el Estado", así como el traslado del agua hasta el puerto, al igual que se ha hecho con Cataluña desde Sagunto (Valencia).
La vicepresidenta y ministra ha venido a describir al Estado inmerso en la disyuntiva "de qué forma puede llegar a transportarse el agua en barco y de dónde", para lo que ha asegurado "un esfuerzo presupuestario para garantizar ese recurso", que implicaría "la participación, la implicación de otras comunidades autónomas", mientras ha proseguido explicando que "no hemos identificado una planta desaladora de titularidad del Estado, pero sí una que no está a pleno rendimiento", antes de puntualizar que "no es Sagunto como para Cataluña".
"Trabajaríamos con la Junta de Andalucía para buscar la fórmula de transportar ese agua, de la planta desaladora hasta un barco a través de un tubo", ha explicado Teresa Ribera, quien ha apuntado la necesidad de contar "en el puerto con capacidad de recogida", antes de admitir que "hemos avanzado sobre cómo organizar esas tareas", al tiempo que ha reconocido a preguntas de los periodistas que "no hemos hablado de la singularidad hídrica" de Andalucía, en la que insiste la Administración autonómica incluso ante ojos de la Unión Europea.
"Hoy contamos ya con el nivel de madurez suficiente sobre esta situación", ha apuntado Ribera acerca del transporte de agua desalada en barcos.
DESALADORAS A LARGO PLAZO, OPERATIVAS ENTRE 2027 Y 2028
Ribera ha situado en el largo plazo la entrada en funcionamiento de desaladoras como la Axarquía en Málaga y en Almería por cuanto ha reconocido que no estarían operativas "hasta 2027-2028", por lo que ha admitido que en ese caso "la fecha se iría más allá de la emergencia" que se afronta en estos momentos.
Con ese horizonte temporal con las desaladoras Ribera ha barruntado otras "opciones intermedias", entre las que ha incluido "el incremento de la capacidad desalación en El Atabal", una planta desaladora perteneciente a Acuamed que abastece a la provincia de Málaga, que se puso en servicio en 2005 tras una inversión estatal de 64 millones de euros y que produce al día 165.000 metros cúbicos de agua tratada y que supone garantizar el abastecimiento de Málaga capital.
La vicepresidenta y ministra ha reivindicado las actuaciones del Estado en la Cuenca del Guadalquivir como organismo de su competencia, ámbito donde ha puesto de manifiesto los 40 millones invertidos en obras de emergencia que "nos permiten garantizar agua de boca para Granada, Jaén, Córdoba y Sevilla".
De igual forma Moreno ha esgrimido las 1.100 actuaciones de la Junta en obras hidráulicas, que han supuesto la ejecución de 1.500 millones, para precisar que serán 4.000 millones los que se inviertan en política hidráulica, por lo que ha blandido los 253 hectómetros cúbicos en capacidad de abastecimiento que ha incorporado la Junta de Andalucía a través de las obras de emergencia con los decretos de sequía.