SEVILLA 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha manifestado este jueves ante el Pleno del Parlamento que no se puede "obligar" a ningún andaluz que se encuentre en desempleo a trabajar en el campo si no quiere, mientras que Vox ha mostrado su preocupación por que haya andaluces en paro que se nieguen a apuntarse a las campañas agrícolas de su provincia y ha exigido mayores controles sobre los subsidios agrarios.
En la sesión de control al Consejo de Gobierno del Pleno del Parlamento, Moreno ha mantenido un debate con el portavoz parlamentario de Vox, quien ha lamentado que en la provincia de Huelva, donde hay 50.000 parados inscritos, sólo 200 se hayan apuntado para la próxima campaña agrícola, cuando la oferta era de 10.000 empleos.
El presidente de la Junta ha indicado que el proceso de selección para esa campaña aún sigue abierto y ha señalado que varios factores pueden llevar a que determinados ciudadanos en paro no se apunten a ella, como la antelación con la que se pone en marcha la selección (se inicia en septiembre y es para trabajar de marzo a junio del año siguiente) o bien la coincidencia con ofertas de empleo en otros sectores.
El presidente ha señalado que su Gobierno quiere garantizar que la campaña agrícola sea un éxito para todos, pero ha querido dejar claro que "no podemos obligar a nadie" a trabajar en algo que no le guste o no quiera, como pueden ser tareas agrícolas.
Ha señalado que nunca va a poner en dudas las ganas de trabajar de los andaluces, al tiempo que ha defendido el asunto de las ayudas agrarias, que dependen del Ministerio de Trabajo, porque ayudan a muchas familias a asentarse en el territorio, sobre todo, en las zonas del interior, y que puedan permanecer allí durante el resto del año cuando finalicen las campañas agrícolas, que sólo son por unos meses.
Otra cosa es que pueda haber algunos casos de fraude, según ha apuntado Moreno, quien ha añadido que cualquier fraude tiene que perseguirse por quien tiene las competencias al respecto, esto es, el Ministerio de Trabajo.
En cuanto al hecho de que en muchas de las campañas agrícolas andaluzas se tenga que recurrir a mano de obra extranjera, el presidente ha manifestado que esa es una situación que se da en todos los países europeos, y ha defendido que se trata de una "inmigración" que es contratada en origen, de manera muy ordenada y con la máxima transparencia, y todo sujeto a la legalidad.
"Es normal en muchos países que la población autóctona no quiera trabajar en esas tareas y se recurre a la población extranjera", ha apuntado el presidente.
Por su parte, Alejandro Hernández ha insistido en que es inexplicable que haya andaluces en paro que no se apunten a las campañas agrícolas, y ha añadido que la realidad es que, al final, la mayor parte de las contrataciones se tienen que realizar con trabajadores extranjeros. Ha apuntado que se estima que este año se tendrá que recurrir a unas 19.000 contrataciones de extranjeros, la mayoría mujeres de Marruecos.
Ha manifestado que un representante patronal onubense ya ha puesto de manifiesto que "no es de recibo que los empresarios tengan que buscar mano de obra en el extranjero porque no hay interés en trabajar" por parte de andaluces.
A su juicio, esta situación requiere de un análisis por parte del Gobierno andaluz y ha mostrado su escepticismo en relación con los informes que quiere elaborar el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) sobre un perfil de las personas desempleadas para mejorar la eficacia de las medidas en los itinerarios de inserción.
Asimismo, ha señalado que son "profundamente escépticos en relación con las políticas activas de empleo", sobre todo, cuando no se abren a la colaboración público y privada, de manera que se garantice una efectiva inserción laboral.