SEVILLA 19 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un lince ha sido encontrado sin vida en la autovía A-4, en el tramo comprendido entre Andújar y Bailén (Jaén), en lo que supone el décimo caso de muerte de ejemplares de esta especie por atropello en las carreteras andaluzas en 2017.
Según los datos del programa LIFE+Iberlince, consultados por Europa Press, el cadáver, de un cachorro hembra sin radiomarcar nacido este año, ha sido localizado este martes en el punto kilométrico 304 de la autovía tras el aviso de un particular.
El cadáver ha sido trasladado de inmediato al Centro de Análisis y Diagnóstico de la Fauna Silvestre de la Junta de Andalucía (CAD), donde se le practicará una necropsia completa.
El caso anterior se dio a principios de septiembre en Vilches (Jaén), mientras que el pasado 10 de agosto agentes de medio ambiente de la Junta de Andalucía localizaron el cadáver de un ejemplar de lince ibérico atropellado, una hembra joven sin radiomarcar, en el punto kilométrico 15,400 de la carretera N-442, en Mazagón (Huelva).
Asimismo, un día antes, el día 9, también fue encontrado muerto un cachorro hembra de lince ibérico, atropellado en el punto kilométrico 1,5 de la CO-3102 entre las localidades cordobesas de Adamuz y Algallarín. El cachorro era uno de los nacidos este mismo año 2017.
El sexto lince ibérico atropellado en las carreteras andaluzas en lo que llevamos de año --una hembra que no estaba radiomarcada-- fue encontrado a mediados de julio sin vida en la autovía A-4 en el tramo de Andújar a Bailén, en Jaén, la misma provincia en la que el 8 de julio fue hallado el cadáver de un cachorro de lince hembra sin radiomarcar en la A-4 a la altura de Santa Elena.
Por su parte, otro lince atropellado fue localizado a principios de abril en la carretera A-301, en la comarca de Guarrizas (Jaén), mientras que a mediados del mismo mes apareció en el punto kilométrico 302 de la carretera A-4, en un tramo localizado entre Andújar y Bailén (Jaén), el cadáver de un cuarto lince muerto.
El primer caso de muerte de un lince por atropello de 2017 tuvo lugar a principios de enero en la carretera A-421, dentro del término municipal de Adamuz (Córdoba), mientras que pocos días después apareció muerto otro ejemplar en el punto kilométrico 65 de la N-420, tramo entre Montoro y Cardeña (Córdoba).