CÓRDOBA 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, ha confesado sentirse "muy querido desde el primer día" en esta Diócesis y ha afirmado que los cordobeses "tenéis la cualidad de ser muy acogedores", en una misa de acción de gracias celebrada en la mañana de este sábado en la Catedral por el cincuenta aniversario de su ordenación sacerdotal.
Según una nota de este distrito eclesiástico, el templo catedralicio se ha llenado de fieles, sacerdotes de toda la Diócesis y de su tierra natal, Puente del Arzobispo, así como un total de ocho obispos y arzobispos --procedentes de Granada, Guadix, Málaga, Huelva, Alcalá de Henares, Almería y Sevilla--, que se han sumado a la celebración de la misa por los cincuenta años de ordenación.
Un don, "siempre inmerecido", a la vocación sacerdotal que ha agradecido el obispo de Córdoba en esta misa donde ha recordado con especial alegría su ministerio. El pastor de la Diócesis se ha sentido gratificado por la presencia de arzobispos y obispos, sacerdotes, fieles, consagrados y familiares presentes en este día y ha hecho balance de sus años de ministerio sacerdotal tanto en su pueblo, Puente del Arzobispo, como en Toledo y en Córdoba, donde ha podido visitar a las 233 parroquias en sus visitas pastorales, detalla la Diócesis que lidera.
"Cierro los ojos y veo a todas las parroquias, sacerdotes, miles y miles de laicos que hoy habéis venido aquí en una digna representación. A todos quiero expresar hoy mi gratitud, porque precisamente en Córdoba tenéis la cualidad de ser muy acogedores y me he sentido muy querido desde el primer día", ha asegurado Fernández.
El obispo de Córdoba ha explicado que este día es un día para dar gracias a Dios y a la Iglesia porque "me ha tratado mucho mejor de lo que hubiera imaginado, puse mi vida entera en manos de Dios y he salido ganando mucho". "Para un obispo la ordenación sacerdotal es un día especial, me emociona lo que he vivido a lo largo de mis veinte años de ministerio y mis cincuenta de sacerdote, me hace vibrar todos los sentimientos del alma y del corazón", ha subrayado.
Monseñor Demetrio Fernández, ha indicado la Diócesis, fue el último obispo en España que llamó el Papa San Juan Pablo II para ser obispo y ha agradecido a Córdoba su acogida, al presbiterio su disponibilidad y ha pedido que nunca falten vocaciones. Igualmente, ha agradecido que en este día haya presidido el altar mayor la imagen de la Virgen de Bienvenida a quien le profesa una profunda devoción.
EL SANTO PADRE FELICITA AL OBISPO DE CÓRDOBA
La celebración de este día ha estado marcado en Córdoba por la solemne misa y la felicitación del Santo Padre, quien ha enviado al Obispo, según ha explicado la Diócesis, una misiva para agradecerle "su diligente labor pastoral ejercida con celo, por el esfuerzo evangélico de anunciar la verdad en la caridad y por la probada solicitud con la que, mediante su constante y sabio ministerio, ha trabajado por el bien de la Iglesia y la salvación de las almas". Al tiempo que le ha deseado "todo lo mejor" y su bendición "a él y a su clero, a los fieles y a sus familiares, solicitándole vivamente plegarias en favor de Nuestro Petrino ministerio".
Por su parte, el Cabildo Catedral le ha hecho entrega de una urna con reliquias de San Juan de Ávila, a quien el Obispo ha manifestado una gran admiración desde su llegada a la ciudad.