CÓRDOBA 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía ha pedido penas de tres años de prisión y multa de 5.400 euros para un hombre acusado de un delito de conducción temeraria, tras supuestamente huir de un control policial con su motocicleta, protagonizar una persecución por calles de la capital cordobesa y posteriormente dar positivo en alcohol.
Según recoge la calificación del Ministerio Público, a la que ha tenido acceso Europa Press, los hechos ocurrieron sobre las 3,30 horas el día 7 de mayo de este año, cuando el procesado conducía la motocicleta por la Avenida de República Argentina en la intersección del Paseo de la Victoria.
Al respecto, el acusado observó a los agentes de Policía Local que estaban realizando un control de alcoholemia y presuntamente efectuó "un giro brusco y prohibido con la intención de eludir el mismo". Así, los agentes iniciaron una persecución con los sistemas ópticos y acústicos activados, "no obedeciendo el procesado a las reiteradas órdenes para detenerse".
De este modo, el fiscal relata que supuestamente realizó la conducción en sentido contrario por la vía existente en los aparcamientos de un hotel para cruzar después por la Avenida República Argentina, momento en el que se vieron varios vehículos "obligados a frenar para evitar colisionar" con la moto.
En este sentido, la persecución continuó por las calles Camino de los Sastres, Miguel Benzo, Antonio Maura y Secretario Carretero, donde "tuvieron que apartarse varios peatones para no ser alcanzados" por el procesado, al ser ésta una calle peatonal, donde existe un pilona que los agentes no observaron y colisionaron con la misma con el vehículo policial, por lo que no pudieron continuar la persecución.
No obstante, alertaron por radio a otros agentes, quienes finalmente interceptaron al acusado en la Avenida Medina Azahara. El hombre arrojó en las pruebas de alcoholemia que le realizaron el resultado de 0,25 miligramos de alcohol por litro de aire expirado, lo que dio lugar a la imposición de la correspondiente sanción administrativa.
Como consecuencia de los hechos, el presidente de la comunidad de propietarios donde se ubicaba la pilona que sufrió daños ha presentado un presupuesto de reparación de unos 3.000 euros, que reclama, aunque una empresa de tasación los valora en 60 euros. El coche policial ha resultado con desperfectos, pero la propietaria renuncia a la indemnización, según informa el Ministerio Público.
El fiscal, además de las penas de cárcel y multa, solicita siete años de privación del permiso de conducir vehículos a motor o ciclomotores y que la aseguradora indemnice a la comunidad de propietarios en 3.000 euros por "los desperfectos ocasionados".