SEVILLA 24 Jul. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Medio Rural y Marítimo de Podemos Andalucía, Alejandro Serrato, ha criticado el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Mercosur --Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay-- avisando de que "pone en peligro los casi 300.000 empleos del sector primario en Andalucía, más de 35.000 en la provincia de Málaga".
En una nota de prensa, Serrato ha exigido al Gobierno de la Junta de Andalucía y, en concreto a la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, que rechace este acuerdo y exija ante Bruselas que no se apruebe "porque este tratado va a matar al campo andaluz".
También ha pedido al Congreso de los Diputados y al Senado que, si este texto no se frena en Bruselas, "lo pare la mayoría parlamentaria que existe para investir como presidente al socialista Pedro Sánchez, ya que todavía este acuerdo tiene que ratificarse en las instituciones europeas y en los parlamentos de los Estados miembros de la Unión".
"Este tratado, específicamente, está fabricado para favorecer exclusivamente a los grandes industriales europeos y a los grandes terratenientes de América del Sur", ha criticado Serrato.
De esta misma forma, el dirigente de Podemos Andalucía ha explicado que "los temores de todos estos productores andaluces están justificados, ya que se eliminarían las barreras de entrada a productos como la carne, el etanol, la soja, las hortalizas o los cítricos, frutos ya muy perjudicados por otros tratados ya en vigor, como el de Unión Europea-Sudáfrica".
Además, también ha indicado que "existen problemas para la salud humana por la entrada de estos productos, ya que en su cultivo y crianza se utilizan sustancias que están prohibidas en la Unión Europea, como determinados antibióticos, pesticidas y hormonas".
En este sentido, ha destacado que este acuerdo afectaría a debates tan importantes, como el que se está dando actualmente en Europa, sobre el glifosato, "ya que en los grandes países productores de América Latina no sólo se permite su uso a gran escala, sino que ni se cuestiona su potencial peligrosidad para la salud y el Medio Ambiente". Y éste ha sido otro de los puntos negativos destacados por Podemos, ya que estos países, "en gran parte, no cumplen con los estándares y normas para la protección medioambiental".