CÓRDOBA 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente provincial del PP de Córdoba, Adolfo Molina, ha dicho este miércoles que, tras haber contactado con los compromisarios del partido en la provincia que acudirán al Congreso Nacional del 20 y 21 de julio, él se mantiene en la "neutralidad" que le ha caracterizado en las primarias del PP y la consecuencia es que dichos compromisarios votarán, "en libertad", al candidato que deseen para presidir el PP.
En declaraciones a Europa Press, Molina se ha referido así a los 36 compromisarios, votados el pasado jueves por los militantes, más los tres que corresponden a NN.GG y los seis natos, entre ellos el propio presidente provincial, que acudirán al cónclave nacional del partido, en el que se medirán, si no alcanzan un acuerdo previo, los dos candidatos más votados a nivel nacional, la ex vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y el diputado Pablo Casado, aunque en Córdoba la más votada fue la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal.
A este respecto, Molina ha recordado que él, desde la dirección del partido en la provincia, ha mantenido "una escrupulosa neutralidad, para que los inscritos votasen con total libertad y sin presiones el pasado día 5, y ahora tengo que seguir aplicando esa neutralidad y seguir dejando que los compromisarios voten lo que cada uno" considere oportuno, en el marco de "esa libertad sin presiones".
Junto a ello, Molina ha asegurado que lo que le "importa es la unidad del partido en Córdoba, una unidad que está ahora mismo salvada, precisamente, con esa posición de neutralidad" que siguen ejerciendo él y "la secretaria general" del PP en la provincia, María Luisa Ceballos.
En cualquier caso, en el PP de Córdoba, según ha señalado, estarán "siempre dispuestos a recibir a los candidatos que quieran reunirse con los compromisarios" cordobeses, siempre con el objetivo de éstos puedan "ejercer su voto con libertad, sin presiones y preservando la unidad del partido", en base al "buen trabajo que se está haciendo en Córdoba", que es lo que a Molina le "importa" y le "preocupa".