SEVILLA 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
El proyecto europeo HY4RES --en el que participan socios de España, Portugal, Francia e Irlanda-- promoverá con Big Data e Inteligencia Artificial (IA) el uso híbrido de energías renovables en los sectores del regadío, la acuicultura, portuario y doméstico. Su objetivo es lograr comunidades autosuficientes gracias al almacenamiento y gestión inteligente de la producción de energía solar, eólica e hidroeléctrica, y la participación de los socios andaluces (Feragua, Universidad de Córdoba y Comunidad de Regantes del Vale Inferior del Guadalquivir) estará enfocada a la aplicación de los resultados en la agricultura de regadío.
Hy4RES es el acrónimo, en inglés, de Soluciones Híbridas para Sistemas de Energía Renovables, y aborda un doble objetivo interrelacionado. Por un lado, la utilización y aprovechamiento conjunto de las energías eólica, solar e hidroeléctrica a fin de promover el autoconsumo basado en energías limpias y así disminuir la emisión de gases. Por otro lado, la utilización de sistemas innovadores de almacenamiento y soluciones de gestión capaces de aprovechar la producción variable de diferentes tipos de energía renovable, haciendo más autosuficientes a consumidores individuales o colectivos, ha explicado Feragua en una nota de prensa.
El proyecto incluye el desarrollo de un software inteligente de gestión de energías renovables que combina sensores de bajo coste, análisis de big data y técnicas de inteligencia artificial (IA). Una tecnología orientada a promover la gestión, previsión e interoperabilidad de diferentes energías renovables en un sistema híbrido, y todo ello bajo la perspectiva de la sostenibilidad no solo ambiental sino económica: la implantación de tecnologías de bajo coste es una de las premisas transversales de este proyecto.
HY4RES es un proyecto de innovación transnacional y multisectorial, cuyos resultados pretenden aplicarse y beneficiar a todos los usuarios y tipos de consumo: doméstico, industrial, portuario, agrícola. Una de sus aplicaciones "más interesantes y prometedoras" la representa el regadío, urgido a encontrar soluciones que favorezcan la producción de energías limpias la reducción de la factura eléctrica.
La modernización del regadío, con la apuesta por los sistemas de regadío más eficientes pero más demandantes de energía, y la desaparición de la factura eléctrica especial para el regadío han significado un "enorme aumento" de los costes eléctricos para las comunidades de regantes, que en Andalucía asciende ya a los 200 millones de euros anuales.
En este contexto, las comunidades de regantes están apostando por la instalación de plantas solares con las que disminuir su dependencia energética y reducir las emisiones a la atmósfera. En Andalucía, además del Valle Inferior, otras comunidades de regantes como el Bajo Guadalquivir y Viar, en Sevilla, Genil Cabra, Bembézar Margen Derecha y Genil Margen Izquierda, en Córdoba, Palos de la Frontera, El Fresno y Valdemaría, en Huelva, y Nuestra Señora de los Dolores, en Jaén, tienen también plantas solares en funcionamiento o en proyecto.
Asimismo, gracias a Redawn, proyecto del que parte HY4RES, el regadío conoce el potencial de la energía microhidráulica como fuente complementaria para sistemas de iluminación, programación y filtrados, pequeños bombeos, recarga de vehículos eléctricos. Finalmente, y aunque no hay experiencias al respecto, la energía eólica podría tener también un aplicación importante en determinadas zonas del regadío andaluz, especialmente en la provincia de Cádiz.
Junto a todo ello, y para maximizar su eficiencia energética en general y para optimizar en particular la inversión realizada en producción de energías renovables, el regadío tiene la necesidad de avanzar en medidas basadas en optimización de parámetros de producción, adaptación de periodos de riego a tarifas horarias más baratas, inversión en monitorización, Big Data e inteligencia artificial para maximizar la eficiencia de su inversión en energías limpias.
Las posibilidades de creación de sistemas híbridos de energías renovables con el que se puedan autoabastecer consumidores individuales y colectivos será puesta a prueba en cuatro plantas pilotos: una en Irlanda, con aplicación en la acuicultura; otra en Oviedo, con aplicación en el sector portuario; una tercera en Portugal, con aplicación en el sector residencial del medio rural; y finalmente una cuarta que será instalada en la Comunidad de Regantes del Valle Inferior del Guadalquivir, asociada a Feragua.
El papel de esta planta será fundamental, por tanto, para aterrizar las conclusiones de este proyecto en el sector del regadío, donde el objetivo es promover la transición de las comunidades de regantes hacia un modelo de energía neta cero, en el que la producción de energía propia procedente de diferentes fuentes (solar, hidroeléctrica y eólica) sea suficiente para abastecer las necesidades de consumo, desarrollando las tecnologías de almacenamiento y gestión necesarias para ello.
La Comunidad de Regantes del Valle Inferior del Guadalquivir cuenta con la mayor planta solar para autoconsumo del regadío español, de 6MWp de potencia y, como parte del proyecto, acogerá la instalación de una microturbina hidráulica así como de una nueva placa solar flotante que se instalará sobre la lámina de agua de una de sus balsas.
El objetivo es conectar estas tres fuentes de energía a través de un sistema de almacenamiento y gestión inteligente que permita el mejor uso posible de la energía generada para así avanzar en el autoconsumo. En la actualidad, esta Comunidad es la primera con el sello ECO20 en su categoría Silver, que acredita un uso de energía renovable entre el 50 y el 70% del total del consumo.
Dotado con un presupuesto de 3,2 millones, es un proyecto perteneciente a la Convocatoria Interreg Atlantic Area, enfocada a la reducción de la dependencia energética con sistemas de energías renovables. Se desarrollará a lo largo de tres años y en él participan socios de España, Portugal, Francia e Irlanda, a través de los cuales se cubre un amplio abanico de territorios del norte al Sur de Europa con condiciones climáticas muy diferentes (cálidas y frías, con alta y baja disponibilidad de viento, ubicaciones costeras y del interior) y con distintos consumidores de energía clave: agricultura, acuicultura y puertos.
En su conjunto, HY4RES incorpora a nueve socios plenos que realizan I+D y cuatro socios asociados que participarán en los proyectos piloto. De todos los países participantes hay al menos dos socios y España es el país más representado con cinco socios: además de Feragua, la Comunidad de Regantes del Valle Inferior y de la Universidad de Córdoba, participan también la Universidad de Oviedo y la Autoridad Portuaria de Avilés.
Por tipo de organizaciones, cuatro socios pertenecen al mundo académico: Trinity College de Dublin (TCD), Universidad de Córdoba (UCO), Universidad de Oviedo (UO) e Instituto Superior Técnico de Lisboa (IST). Tres al ámbito estrictamente empresarial: las pymes Easy Hydro, IG Energy y Vertigo Lab. Cuatro son asociaciones civiles y empresariales: Feragua, Asociation des Chambres d'Agriculture de l'Arc Atantique (AC3A), CR Valle Inferior e Irish Fish Producers Organization (IFPO). Y finalmente participan una autoridad pública regional y otra local: Puerto de Avilés y Municipio de Castanheira de Pera.