GRANADA 4 Nov. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, ha señalado este lunes en Granada que "no hay ningún problema social" sobre el centro de Menores Extranjeros no Acompañados (MENA) enclavado en el barrio de La Macarena en Sevilla, ha argumentado en ese sentido que "la convivencia es excepcional" y ha recordado que Vox como integrante de la Comisión Parlamentaria sobre Protección de la Infancia "estuvo viendo cómo vivían", por lo que ha concluido que "no entendemos qué significaba este acto".
Ruiz, en declaraciones a los medios tras entrevistarse con el alcalde de Granada, Luis Salvador, ha descrito que los menores extranjeros no acompañados son "quince niños que están estudiando, formándose" y ha sostenido que "el barrio los ha aceptado perfectamente".
La consejera de Igualdad ha apelado a que "tendrán que probarlo", en referencia los argumentos manejados por la presidenta de Vox Madrid, Rocío Monasterio, quien este lunes ha denunciado frente a la puerta del centro Mena la situación de "inseguridad" y los "graves problemas" que genera la presencia de estos menores inmigrantes no acompañados para los vecinos de la zona.
"El barrio los ha aceptado perfectamente", ha proclamado la consejera de Igualdad, quien ha asegurado que no existe "ningún problema social" en el barrio de Sevilla donde se encuentra el centro de menores extranjeros. "Son niños muy bien atendidos", ha apuntado la consejera de Igualdad.
La presidenta de Vox Madrid, Rocío Monasterio, ha argumentado este lunes en Sevilla que no se puede seguir abriendo centros de Menas porque al final lo que provocan es un "efecto llamada". "No puede ser que Andalucía tenga la mitad de los menas de toda España y, como recogen los informes de la Fiscalía, no son fácilmente integrables y estamos teniendo un problema también con los asistentes sociales que trabajan en los centros de menas porque están sufriendo agresiones", ha dicho.
"Esto se tiene que controlar y no puede haber todos los años un número sin control de menas que cuando cumplen 18 años acaban en nuestros barrios sin ningún tipo de tutela, sin haber sido integrados y sin ninguna posibilidad de futuro, porque como no tiene papeles, tampoco pueden tener acceso a un trabajo y una vivienda", ha señalado.