MONTORO (CÓRDOBA)
El Servicio de Protección de la Naturaleza investiga a un vecino de la localidad de Bujalance y a otro de la localidad de Adamúz por realizar la caza de aves con artes o medios de caza prohibidos, utilizando lo que en el argot de la caza se conoce como 'chifle', una forma de caza no selectiva y masiva.
Según apunta la Guardia Civil en nota de prensa, durante octubre
prolifera la utilización de medios prohibidos no selectivos durante la noche para la captura del zorzal en su paso migratorio, conocida esta modalidad ilegal como 'Chifle', que consiste en el uso de redes colocadas verticalmente en zonas de paso, conocidas como redes japonesas, invisibles o niebla y utilizando un reproductor de sonido electrónico --reclamo mediante cantos de imitación-- para atraer a dichas aves.
Ante ello, y al sospechar los integrantes de la patrulla del Seprona de Montoro que en la zona se pudiera estar llevando a cabo este tipo de caza, establecieron un operativo de servicio mediante el que detectó la utilización de uno de estos medios de caza prohibidos en una zona alejada de camino.
La Guardia Civil procedió entonces a la incautación de los medios de caza ilegales y a la liberación de las aves que han quedado atrapadas, entre ellas varios zorzales y una curruca capirotada, que es una especie insectívora, que figura en la Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, evidenciando que se trata de un medio de caza no selectivo y muy dañino para la avifauna de la zona.
Por ello, se procedió a la investigación de dos personas como presuntos autores de la comisión de un delito contra la flora y fauna silvestre.