SEVILLA 12 May. (EUROPA PRESS) -
La Sección Primera de la Audiencia de Sevilla ha celebrado este miércoles una nueva sesión del juicio de la pieza separada de las irregularidades investigadas en la empresa de capital riesgo Invercaria, perteneciente a la Junta de Andalucía, relativa al presunto delito continuado de prevaricación en concurso medial con un delito continuado de malversación detectado en los prestamos concedidos entre 2006 y 2011 a la diseñadora de moda flamenca Juana Martín, una causa dirigida contra la citada modista, el expresidente de Invercaria Tomás Pérez-Sauquillo; el exdirector de promoción de la entidad Cristóbal Cantos, denunciante del caso; y Antonio Nieto, exdirector financiero.
Durante esta sesión de este miércoles ha testificado un perito tasador encargado de elaborar un primer estudio de la marca de Juana Martín como diseñadora, toda vez que en la causa pesa que Juana Martín e Invercaria, con Pérez Sauquillo al frente, alcanzaron un acuerdo para crear la sociedad Juana Martín Andalucía, con una aportación no dineraria de la modista consistente en su marca, valorada tanto en 440.000 euros como en 390.000 euros en la parte expositiva del acuerdo firmado entre ambas partes.
Este perito tasador ha testificado que fue la entonces presidenta de la Asociación de Mujeres Empresarias de Córdoba María Fernández Pino, otrora investigada en las actuaciones, quien a título "particular" le encargó esta valoración de la marca de Juana Martín.
SÓLO "UN BORRADOR"
Al respecto, aunque ha admitido que fruto de ello media un informe firmado por él mismo, ha alegado que dicho texto esta "inacabado" y constituye sólo "un borrador" porque "ninguna de las partes", es decir Fernández Pino, la diseñadora o Invercaria, le facilitaron los datos que reclamó para el informe de valoración encargado, es decir los balances de cuentas, de patrimonio o de pérdidas y ganancias de la actividad de Juana Martín.
Fue, según ha defendido, un "trabajo inacabado" elaborado con "datos generales", pues tan sólo le habrían entregado información respecto a "entrevistas, reportajes" y desfiles promovidos por la modista.
Respecto a cómo en dicho documento se atribuye un valor de 600.000 euros a la marca de Juana Martín, este perito tasador ha testificado que para ese "cálculo", tuvo en cuenta aspectos como los "cuatro tipos de moda" que abarcaban las actividades de la diseñadora, las "inversiones" de la misma en materia de desfiles, textil o el montaje de eventos, con costes de hasta "1.500 o 3.000 euros" por vestido; y el valor de una antigua casa palacio en el centro de Córdoba que usaba como "taller y tienda".
Eso sí, ha precisado que no podía "argumentar" que esos 600.000 euros respondían a "valores reales" porque carecía de la documentación relativa a las cuentas de Juana Martín, sus ganancias o su "balance inmobiliario". Es decir que para la elaboración del documento se habría servido de "activos intangibles" no "justificados" en el plano documental.
"No era un estudio económico serio. No aportaron documentación de ningún tipo", ha aseverado, insistiendo en que no le fue entregada la documentación necesaria para ello. Es más, pese a que en el informe figura su firma, este perito tasador ha expuesto que no había "autorizado el uso" del documento en cuestión, pues el mismo estaba "inacabado" y ni siquiera lo cobró.