El tercer contingente de La Brigada 'Guzmán el Bueno' X parte hacia Valencia

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CÓRDOBA 12 Nov. (EUROPA PRESS) -

Tras diez días desplegados en la zona afectada por la DANA en Valencia, los dos contingentes de militares allí enviados por la Brigada 'Guzmán el Bueno' X, con base en Cerro Muriano (Córdoba), van a ser relevados por nuevos efectivos, que integran un tercer contingente y que darán continuidad a los trabajos que se están llevando a cabo sobre el terreno desde el pasado 2 de noviembre.

En concreto y según ha informado la BRI X en una nota, en la mañana de este martes han partido con destino a Valencia efectivos de la Brigada pertenecientes al Regimiento de Infantería 'Garellano' 45, con sede en Munguía (Vizcaya), y también al Regimiento de Infantería 'La Reina' 2, al Regimiento Acorazado 'Córdoba' 10, al Batallón de Cuartel General X y al Grupo de Artillería de Campaña X, con base todos ellos en Cerro Muriano (Córdoba).

Van a dar el relevo a los efectivos del Grupo Táctico que se proyectó el día 5 de noviembre, a la vez que han partido militares del Batallón de Zapadores X y del Grupo Logístico X que darán el relevo, por su parte, a sus compañeros que se encuentran en la zona desde el pasado día 2.

Este relevo conforma la estructura de fuerza desplegada por la Brigada 'Guzmán el Bueno' X, un Grupo Táctico con personal en labores y tareas de apoyo general a la población de las zonas afectadas, una Unidad de Zapadores en misiones específicas propias de su especialización y de las capacidades que puede desarrollar con el material en dotación y una Unidad Logística, llevando el cometido particular de apoyo a zapadores, pero también con capacidades que le permiten proporcionar apoyo logístico puntual al Grupo Táctico o a la población, si se requiere.

En los diez días que los dos primeros contingentes de la BRI X han estado desplegados han llevado a cabo tareas de limpieza y acondicionamiento de calles y viales, achique de aguas de casas, sótanos y garajes, retiradas de lodo, enseres, coches y restos arrastrados por las riadas, en las poblaciones afectadas de Massanassa, Paiporta y Loreguilla.

Entre los trabajos realizados se encuentra la habilitación del campo de futbol de Alfalfar como vertedero improvisado y provisional para la acumulación de los restos de la limpieza. Se han peinado ramblas, como la del Barranco del Poyo, y campos de cultivo y riberas en Gestalpar, en la búsqueda de personas desaparecidas.

De igual forma, los militares de la Brigada de Córdoba han contribuido en la distribución de víveres y artículos de primera necesidad allá donde se les ha demandado o, como en Sedaví, han inspeccionado aparcamientos subterráneos para extraer y retirar vehículos, a la vez que han comenzado con las tareas de desatasco y acondicionamiento de la red de alcantarillado, en prevención de la nueva previsión de lluvias.

Los militares de la Brigada X han trabajado día y noche, en turnos de 12 horas, a destajo; no han escatimado esfuerzos, empeñándose codo a codo con ciudadanos afectados o voluntarios venidos de fuera, con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y cuerpos de Bomberos desplazados desde toda España, y así continuará la BRI X, junto al resto del Ejército de Tierra, todo el tiempo que sea necesario.

Mientras tanto, los componentes de la BRI X que permanecen en la base de Cerro Muriano y el acuartelamiento de Soyeche, al igual que en otras bases, continúan apoyando al personal desplegado, sosteniendo el esfuerzo mediante el impulso logístico que garantice que cada militar en el terreno disponga de los medios para desempeñar su misión y preparando la generación de nuevos contingentes, con la finalidad de reiterar cuantos esfuerzos sean necesarios.

El Ejército de Tierra ha emplazado sobre el terreno todas las capacidades solicitadas, permaneciendo abiertos a cualquier nueva necesidad que surja. Con todo, los relevos que se están efectuando entre las unidades de la fuerza interviniente aseguran el impulso en los cometidos asignados, minimizándose el tiempo de los mismos, para evitar el impacto sobre la continuidad de los cometidos asignados.