GRANADA 1 Abr. (EUROPA PRESS) -

El diputado de Vox por Granada en el Congreso, Jacobo Robatto, ha reiterado este martes la oposición "frontal" de su formación a la "imposición" de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), que estaba previsto que entrara este martes en vigor en la capital granadina pero que "finalmente se ha retrasado".

"La ZBE es una restricción que el PP del Ayuntamiento de Granada ha aplicado a los vecinos y el equipo de gobierno se ha visto obligado a rectificar en las excepciones que eran un auténtico disparate y que aún hoy continúan siendo insuficientes", ha denunciado el diputado de Vox, que ha incidido en que se han presentado casi 400 alegaciones a este proyecto, lo que demuestra el "rechazo generalizado" a la iniciativa.

El diputado nacional de Vox ha querido alertar de que, pese al aplazamiento, la ZBE sigue adelante y se comenzará a multar a los granadinos en el próximo mes de octubre "Es una medida que tiene un claro afán recaudatorio y que afectará a miles de granadinos restringiendo de forma notable sus libertades", ha continuado para recordar a continuación que la ZBE afectará al comercio o a los residentes en los municipios del área metropolitana.

Robatto ha estado acompañado de las ediles de Vox en el Ayuntamiento de Granada, Beatriz Sánchez Agustino y Mónica Rodríguez Gallego, el parlamentario y presidente provincial del partido, Ricardo López Olea, además de concejales en municipios del área metropolitana.

"Lo peor es que esta ZBE, que se está aprobando con la mayoría absoluta del PP, solo puede ir a más. Las restricciones van a afectar a más personas en los próximos años y van a seguir imponiéndose sobre todo el municipio de Granada", ha lamentado el diputado de Vox, que ha recalcado que "la extensión" de la zona restringida "es desproporcionada e injusta".

Además Robatto ha insistido en que la tramitación de la ZBE está siendo "un desastre", con retrasos constantes, con rectificaciones del equipo de gobierno por "su improvisación y con falta de información para los vecinos".

"En definitiva, mostramos nuestro rechazo a esta medida con afán recaudatorio y que castiga a los granadinos, que les impide circular libremente con sus vehículos por la ciudad de Granada", ha concluido Robatto.