SEVILLA, 15 May. (EUROPA PRESS) - El ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, ha manifestado este lunes que el ataque informático masivo del pasado viernes, con efectos en "120.000 equipos de 150 países", alcanzó en España a "1.200 equipos", si bien las consecuencias de la "oleada" están "ya muy mitigadas". Zoido, en paralelo, ha reconocido que "nunca se puede descartar" la posibilidad de un "rebrote", pero asegura que España está "preparada para combatir" una situación como la del pasado viernes. En un acto institucional en Sevilla, Zoido ha expuesto que con aproximadamente 1.200 equipos "afectados" por el ataque informático a gran escala del pasado viernes, España aglutina sólo un uno por ciento de las víctimas, figurando en el "puesto 16" de los países afectados, por el número de equipos alcanzados. "Los efectos de la oleada están muy mitigados ya", ha asegurado, no obstante. Y es que a lo largo del fin de semana, según el ministro, "los técnicos de las organizaciones afectadas han estado trabajando intensamente con los equipos del Estado, para poder recuperar toda la información". "El sistema de reacción español ha funcionado muy bien", ha enfatizado Zoido, defendiendo que "España fue el primer país donde se detectó el incidente y se empezó a trabajar inmediatamente para recuperar todos los sistemas" informáticos, para que "ninguno de los servicios esenciales" del país se viese afectado. El ministro, no obstante, ha reconocido que "la posibilidad de un rebrote es algo que nunca se puede descartar", aunque ha asegurado que en España, "estamos preparados para poder combatirlo inmediatamente, como se ha hecho a lo largo del fin de semana". "Las administraciones públicas y las empresas están aplicando protocolos preventivos para evitar que se repita una situación como la del viernes y el Ministerio de Interior está en estrecho y permanente contacto con nuestros operadores de servicios esenciales, evaluando de forma continúa el impacto del ataque y las medidas puestas en marcha para mitigarlo", ha expuesto. Además, ha llamado a que las empresas afectadas por este ataque informático a gran escala "denuncien" lo sucedido, para "que se pueda investigar los hechos y perseguir a los responsables", toda vez que ha descartado "cualquier tipo de connotación de tipo terrorista". "No hay ahora mismo ningún elemento que nos permita deducir que ha habido un ciberataque terrorista", ha señalado el ministro.