El BOE publica la Declaración de Impacto Ambiental para el proyecto de dragado de mantenimiento del Puerto de Huelva

HUELVA 30 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental ha emitido una Declaración de Impacto Ambiental para el proyecto de dragado de mantenimiento de calados en aguas interiores del Puerto de Huelva, que tiene como objetivo garantizar la operatividad en términos de seguridad y el buen funcionamiento del tráfico mercantil.

Según la resolución, con fecha de 16 de diciembre, publicada este lunes en el Boletín Oficial del Estado (BOE), consultada por Europa Press, las "especiales características geomorfológicas y ambientales" del emplazamiento del Puerto de Huelva "condicionan la evolución del calado de la canal de navegación, que tiende a reducirse en los muelles y en la canal de acceso, ya que se van produciendo aterramientos en zonas puntuales".

Por ello, continúa el documento, para "garantizar la operatividad en términos de seguridad y el buen funcionamiento del tráfico mercantil", son precisos dragados en su canal de navegación, muelles de servicio y pantalanes privados, así como asegurar las condiciones de navegabilidad, permitiendo que "la entrada, salida y maniobra de buques se realice de forma segura".

Al respecto, "en torno el 98% de la carga total anual de metales al estuario de Huelva", donde se ubica el Puerto, son aportados por los ríos Tinto y Odiel, debido a los drenajes ácidos naturales y mineros aguas arriba (hasta 80 km) del espacio portuario. Por tanto, el dragado de zonas donde se acumulan materiales con contaminación supone la retirada de elevadas concentraciones de metales pesados, que quedan depositados en el medio.

De este modo, el proyecto se desarrollará en las aguas de Zona I o aguas interiores, aunque solo se plantea dragar las áreas en las que haya acumulación de materiales. No obstante, el Puerto prevé realizar un dragado de un total de 2,5 millones de metros cúbicos de materiales en un periodo de cuatro años.

Para ello, el Puerto contempla, realizar semestralmente batimetrías para identificar los puntos donde se han producido aterramientos por acumulación de materiales y, por tanto, dragar de forma selectiva solo las áreas donde existan cúmulos que reduzcan el calado, "suponiendo un riesgo para la navegación", por lo que esta planificación "depende exclusivamente de las condiciones de calado existentes y del riesgo que pueda suponer para la navegación".

Para ello, a priori, se empleará la draga de succión en marcha y, de forma puntual en los dragados de los muelles de escala reducida o de bajo, podría ser necesario el uso de una draga de cuchara montada sobre pontona

Por otra parte, la gestión del material dragado se llevará a cabo en función de su caracterización, en cumplimiento de las directrices de la Comisión Interministerial de Estrategias Marinas, que lo definen dentro de la categoría A, fundamentalmente por las arenas de la dinámica litoral, y B o C, según las concentraciones de metales pesados aportados por los ríos Tinto y Odiel.

En ese sentido, los materiales de categoría C, cuya concentración en metales pesados es elevada, serán confinados en recintos localizados anexados a la cara interna del Dique Juan Carlos I y habilitados para ello. Los materiales que no requieren confinamiento conforme a dichas directrices (categorías A y B), se transportarán y depositarán en el vaciadero marino, localizado sobre un fondo fangoso y a una profundidad entre 35 y 50 metros.