La víctima asegura que el acusado "nunca" le ha aceptado en su familia quizá por su "cultura" como marroquí y musulmán
SEVILLA, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Sección Primera de la Audiencia de Sevilla ha celebrado este miércoles el juicio promovido contra dos varones por presuntos delitos de tenencia ilícita de armas y de asesinato en grado de tentativa, después de que uno de ellos, con la ayuda del otro, disparase presuntamente con un revólver contra su yerno en el barrio hispalense de Los Pajaritos. El principal acusado, para el cual la Fiscalía pide once años y medio de cárcel, ha negado los hechos y ha manifestado que en aquella época consumía drogas "todo lo que podía".
Según el escrito de acusación de la Fiscalía, recogido por Europa Press, los acusados son Manuel M.Y., de unos 45 años de edad actualmente; y Luis C.C., de unos 24 años, ambos con antecedentes penales no computables en esta causa y quienes la madrugada del 15 de mayo de 2021 habrían acudido hasta las inmediaciones de un "quiosco clandestino" de la calle Mirlo regentado por el yerno del primero, respecto al cual ambos sentían "animadversión por motivos familiares".
En el entorno de dicho quiosco, a grandes rasgos una ventana de un piso bajo abierta a la calle donde el yerno del primer acusado, Rachid S., atendía a "la clientela"; Luis C.C. habría facilitado a Manuel M.Y. un "revólver de grandes dimensiones" que no ha sido intervenido en la investigación de los hechos.
HABÍA MENORES
Empuñando el revólver, Manuel M.Y., siempre según la Fiscalía, se habría posicionado "sorpresivamente delante de la ventana" donde Rachid S. "estaba atendiendo en ese momento" de la madrugada a dos menores. El citado acusado, según el Ministerio Público, apartó a los menores, "introdujo" por la ventana el brazo con el que empuñaba el revólver y disparó dos veces contra Rachid, alcanzándole en el abdomen y una pierna, mientras le gritaba "¿ahora qué, maricón?".
En su fuga, según el Ministerio Público, Manuel M.Y. habría pasado además junto a la vivienda de su hija, "muy próxima" al quiosco "clandestino"; y al ver que ella estaba asomada a la ventana , "alertada por las detonaciones" de los disparos, le habría espetado la frase "ya se le ha acabado el rollo a tu marido". Ello, pese a que sobre él pesaba la prohibición judicial de acercarse a su hija o comunicarse con ella, según precisa la Fiscalía.
Durante el juicio, Manuel M.Y., para el que la Fiscalía pide un total de 18 meses de cárcel por un presunto delito de tenencia ilícita de armas; más otros diez años de prisión por un presunto delito de intento de asesinato, sólo ha accedido a contestar las preguntas de su abogado defensor, asegurando que nunca ha empuñado un arma.
LOS "ENEMIGOS" DE LA VÍCTIMA
Además, ha negado que la noche de actos se acercase al lugar de los hechos, asegurando que no quebrantó la orden de alejamiento que pesaba sobre él respecto a su hija porque él esa noche no estaba en Los Pajaritos. A su entender, los testimonios vertidos en su contra respecto a los supuestos hechos derivan de personas que quieren "ayudar" a su yerno, quien según ha dicho "tiene bastantes enemigos".
En ese sentido, ha admitido que su yerno y él son "incompatibles", circunscribiendo tal extremo en que no tienen "contacto" social alguno.
Especialmente, ha explicado que en aquella época consumía droga "todo lo que podía", concretamente cocaína, heroína, éxtasis y MDMA, sustancias que ha mencionado expresamente. "Todo me lo tomaba", ha insistido, asegurando que consumía drogas "todos los días".
Luis C.C., para quien el Ministerio Público solicita también 18 meses de cárcel por un presunto delito de tenencia ilícita de armas, más ocho años adicionales de prisión por un delito de asesinato en grado de tentativa, ha defendido que esa noche estaba en su domicilio de Brenes, que no estuvo con Manuel M.Y. y que nunca ha tenido un arma en sus manos. Eso sí, al igual que el otro acusado, sólo ha accedido a contestar a su abogado defensor.
Rachid S., víctima de los presuntos hechos, ha corroborado los hechos descritos en el escrito de acusación de la Fiscalía, identificando a Luis C.C. como la persona que habría acompañado a Manuel M.Y. y asegurando que si en sus primeras comparecencias ante la Policía y el juez instructor dijo que sólo actuó una persona en su contra fue porque estaba "nervioso" por la agresión sufrida y bajo los efectos de la "anestesia".
Especialmente, ha señalado que Manuel M.Y., padre de su esposa, "nunca" le ha "aceptado" como miembro de su familia, valorando la posibilidad de que tal extremo derive de su cultura como súbdito marroquí y musulmán.