SEVILLA, 26 May. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha cifrado el impacto de la final de la UEFA disputada en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán en 75 millones de euros (las primeras previsiones apuntaban a algo más de 60 millones), al tiempo que ha defendido que los servicios públicos --limpieza, transporte y seguridad-- funcionaron "como un reloj", y ha calificado de "fake" las fotografías difundidas de desperfectos en enclaves patrimoniales como la Plaza de España. Frente a este balance, el PP y Cs han criticado las "imágenes lamentables" en espacios públicos del Centro de la ciudad, convertida en un "botellódromo".
Los grupos municipales del PP y Cs han coincidido en el Pleno de este jueves en sus críticas a lo que han considerado una "falta de planificación" del Ayuntamiento en relación con la final de la UEFA. Aun "no poniendo en duda" que la ciudad tiene que apostar por este tipo de eventos, los portavoces del PP y Cs, Juan de la Rosa y Álvaro Pimentel, respectivamente, han pedido al alcalde "evitar" en un futuro las "imágenes lamentables" que se pudieron ver en la Plaza de España y en el Prado, con "las fuentes convertidas en jacuzzi", o los urinarios provisionales instalados en la fachada del Salvador.
El alcalde ha pedido "disculpas" a los sevillanos por las "afecciones" sufridas, ha reconocido que "hay margen de mejora" y ha reconocido que "indudablemente, afeamos los monumentos" con los urinarios en las zonas en las que se ubicaron. Pero, a renglón seguido, se ha preguntado: "¿Dónde querían que los pusiéramos, en Rochelambert, en Bellavista?". Asimismo, Muñoz ha acusado al PP de "mentir" y difundir imágenes "fake" sobre actos vandálicos en la Plaza de España. "El patrimonio de la Plaza de España no sufrió ningún desperfecto. Es un fake, es mentira. En política no todo vale", ha espetado.
Tanto De la Rosa como Pimentel ha afeado al Ayuntamiento un "trato discriminatorio" a los sevillanos con respecto a los aficionados alemanes y escoceses que se dieron cita en Sevilla. El portavoz del PP ha acusado al alcalde de ser "escrupuloso con los nuestros y permisivos con los de fuera", en alusión a las restricciones de venta de alcohol en Semana Santa y Feria. Pimentel ha lamentado el "doble rasero". "Los sevillanos no le han felicitado. Se les ha faltado el respeto porque se les ha tratado de manera discriminatoria. No vamos a tolerar que se les falte el respeto. Así solo va a conseguir que aumente la turistofobia", ha replicado al alcalde cuando éste ha aludido a las "felicitaciones" de hoteleros, hosteleros, comercio y UEFA por la organización de la final.
Muñoz ha aclarado que el Ayuntamiento "no ha pagado" las dos zonas habilitadas para las aficiones y ha remarcado que el promotor de que la final fuera en la ciudad fue el Sevilla FC. Sí ha reconocido "gastos extras" para habilitar servicios públicos que, en el caso de seguridad, ha supuesto el "mayor dispositivo" en un evento de este tipo. "Estoy orgulloso de cómo han funcionado, como un reloj", ha apostillado.