La empresa confía en que haya "seguridad policial para todos" y se garantice la "libertad de competencia"
SEVILLA, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
La responsable de Marketing de Cabify en Sevilla, Jessica Alcalde, ha negado este lunes que esta empresa de vehículos de transporte concertado esté incurriendo en competencia desleal hacia el sector hispalense del taxi, defendiendo que su "modelo de negocio" está regulado y constituye "una opción más" en materia de movilidad. La empresa, implantada en Sevilla desde el pasado mes de septiembre con unos 15 vehículos, cuenta "cada vez con más usuarios" y, en consecuencia, prevé "aumentar la flota en breve".
Jessica Alcalde ha participado este lunes en una rueda de prensa celebrada en la capital andaluza, en torno a las soluciones emergentes en materia de movilidad, como es el caso de los coches de alquiler con conductor contratados mediante una aplicación digital para teléfonos móviles inteligentes, sector al que pertenece Cabify.
La rueda de prensa se ha celebrado, por cierto, después de que el pasado viernes se celebrase una reunión en el Ayuntamiento de Sevilla, entre el concejal de Seguridad y Movilidad, Juan Carlos Cabrera (PSOE), las principales asociaciones del sector hispalense del taxi, --Unión Sevillana del Taxi y Solidaridad Hispalense del Taxi--, y precisamente representantes de Cabify.
Y es que después de que Cabify desembarcase en Sevilla el pasado mes de septiembre, los taxistas denuncian supuestas situaciones de "intrusismo" por parte de los conductores de esta empresa de vehículos de transporte concertado, quienes de su lado habrían sufrido presuntos casos de violencia a cuenta de su actividad.
Todo ello, en un escenario en el que el sector hispalense del taxi está marcado por no pocas voces y alusiones a presuntos cobros abusivos, supuestas situaciones de violencia y el monopolio que un grupo de taxistas habría impuesto para hacerse con el control de la parada del aeropuerto de San Pablo, sujeta a una tarifa única con un precio de 22,2 o 24,75 euros.
Frente a estas problemáticas, el Ayuntamiento prevé que antes de que acabe febrero, sean un total de 20 los agentes de la Policía Local destinados a su Servicio Especial de Transporte e Intrusismo (SETI) o asignados a las paradas de taxi del aeropuerto de San Pablo y la estación de trenes de Santa Justa, para "combatir el intrusismo, las conductas irregulares o los cobros abusivos". "Van a trabajar en uno y otro sentido", ha manifestaba el concejal de Seguridad y Movilidad.
UNA "OPCIÓN MÁS" DE TRANSPORTE URBANO
A partir de ahí, la responsable de Marketing de Cabify en Sevilla ha negado que la actividad de la empresa incurra en una situación de competencia desleal respecto al sector tradicional del taxi. "Es una opción más, una alternativa", ha dicho, explicando que la actividad de los vehículos de transporte concertado está perfectamente regulada por la Ley y sujeta a su correspondientes licencias e impuestos.
Ante la "desinformación" que a su juicio reina en el asunto, Jessica Alcalde ha detallado que los coches de Cabify cuentan con su "licencia VTC", es decir de vehículo de transporte concertado, y la empresa "paga impuestos" como cualquier otra. "Simplemente es otro modelo de negocio, una opción más de movilidad", ha dicho, concretando que los coches de Cabify no circulan a la búsqueda de pasajeros, sino que responden exclusivamente a la contratación de los portes mediante su aplicación para teléfonos móviles inteligentes, con una carrera mínima de seis euros pero con precios ceñidos sólo al kilometraje y no a los tiempos o a las fechas.
Precisamente por ello, "no hay tarifa" fija para los servicios relacionados con el aeropuerto, por ejemplo, y en consecuencia los portes más demandados son aquellos relacionados con el aeródromo, la estación de trenes de Santa Justa o el palacio de exposiciones y congresos. "La relación calidad precio es bastante razonable", ha defendido, abundando que los vehículos de Cabify ofrecen aspectos como wifi o música a elegir, por ejemplo.
CRECE "MES A MES"
Es más, ha expuesto que la demanda de portes "crece mes a mes" y tras contabilizar más de 3.000 usuarios "registrados" desde septiembre, la empresa prevé "aumentar la flota en breve".
En cuanto a las supuestas situaciones de violencia que habrían sufrido algunos conductores de Cabify, Jessica Alcalde ha admitido que "han ocurrido bastante en el último mes" y la empresa ha interpuesto las correspondientes "denuncias". En ese sentido, y tras la reunión celebrada el pasado vienes, ha confiado en que "la seguridad policial va a estar ahí para todos", también para garantizar "la libre competencia".
"El sector del taxi siempre ha sido muy endogámico", ha opinado, avisando de que la "convivencia" entre diferentes "alternativas" para la movilidad urbana "es el futuro". "Cabify va a seguir en Sevilla", ha enfatizado Jessica Alcalde de modo "rotundo".