SEVILLA 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Colegio Oficial de Arquitectos de Sevilla (COAS) y la Fundación Docomomo Ibérico han distinguido con la Placa Docomomo a la sede del Colegio Oficial de Médicos de Sevilla (1972), obra de los autores Rafael de la Hoz Arderius y Gerardo Olivares James.
En el marco de los actos de la XXII Semana de la Arquitectura, la colocación de la placa tendrá lugar este miércoles 4 de octubre, a las 12,30 horas, en la sede del Colegio Oficial de Médicos de Sevilla, situada en la Avenida de la Borbolla, 47.
Con esta actividad, que el COAS realiza en colaboración con la Fundación Docomomo, se busca lograr el reconocimiento de la arquitectura del movimiento moderno, que es parte de nuestra cultura del siglo XX, su protección patrimonial y conservación.
Al sur de la ciudad de Sevilla, la sede del Colegio Oficial de Médicos se levanta sobre un solar de planta trapezoidal, con 1.713 metros cuadrados de superficie, enfrentado al Parque de María Luisa.
En un hábil trazado de los límites del edificio, el contorno del solar conforma el volumen del colegio, reservando zonas libres para conformar los accesos y jardines.
Evitando la pesadez de un gran edificio que habría encajado en el entorno, los autores realizaron una sencilla diferenciación de las dos funciones que originalmente se desarrollaban en el edificio, Colegio Médico y residencia (actualmente en uso como oficinas del Colegio), expresándolos al exterior en los volúmenes construidos y en el desarrollo de circulaciones.
La residencia se sitúa en las dos últimas plantas del conjunto, en un paralelepípedo que sobresale del volumen inferior, conformando los porches cubiertos de ingreso.
En el subsuelo del Colegio se alojan el salón de actos, servicios y aparcamientos, reservando la planta baja para la zona administrativa, que exige el máximo contacto con el público diario, y ubicando en primera planta los recintos más nobles del programa, los que albergan la zona cultural y directiva.
La apuesta por la modernidad en sus formas lleva a una sucesión de juegos volumétricos, luz y sombras, de fachadas frontales ciegas frente a laterales abiertos, de contrastes entre los aplacados pétreos y los muros cortina; explicitando las formas estructurales.
El edificio ha sido relacionado con la arquitectura constructivista rusa, así como con el brutalismo británico, según especifica el COAS.