El conocido disidente cubano Vladimiro Roca niega que Yáñez tuviera previsto reunirse con su formación política

Actualizado: lunes, 4 enero 2010 20:35

El presidente del ilegalizado Partido Socialdemócrata critica el "apoyo incondicional de Zapatero" a Cuba y cree que la represión aumentará en 2010

MADRID/SEVILLA, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -

El presidente del ilegalizado Partido Socialdemócrata de Cuba, Valdimiro Roca admitió hoy no tener constancia de que las autoridades cubanas de no dejaran entrar en la isla la pasada noche al eurodiputado andaluz Luis Yáñez porque "estas noticias no se publican en Cuba" y confirmó que Yáñez, en ningún caso, tenía previsto mantener una reunión con su ilegalizada formación política.

En una entrevista telefónica con Europa Press, Roca admitió que las autoridades cubanas suelen autorizar la entrada a la isla en caso de "viajes oficiales". "Lo dejan entrar y después paran las entrevistas" incómodas para La Habana, explicó.

Por otro lado, Roca criticó "el apoyo incondicional de Zapatero y Moratinos" al Gobierno de La Habana sin contraprestación alguna y auguró que "la represión va a aumentar muchísimo" durante la presidencia española de la Unión Europea.

Roca admitió creer que "con la presidencia española, la represión va a aumentar muchísimo por la política de apoyo incondicional de Zapatero y Moratinos" al Gobierno que encabeza Raúl Castro, al tiempo que acusó tanto al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, como a su ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, de mantener "una complicidad completa" con el Ejecutivo de La Habana.

El conocido disidente cubano aseguró que el Gobierno de Raúl Castro se sitúa "entre los más represivos" y precisó que sólo en 2009 las autoridades cubanas han "represaliado a más de 175 personas que están en prisión a la espera de un juicio" para responder a delitos de "atentados, desacato y deorden público", fundamentalmente.

Además, permanecen encarcelados unos 200 presos de conciencia, incluidos 53 del grupo de los 75 disidentes detenidos en la denominada Primavera Negra en 2003.

Ante estas cifras, Roca subrayó su deseo de que los Veintisiete no logren el "consenso" necesario para sustituir la Posición Común de la Unión Europea sobre Cuba, aprobada en 1996 y que condiciona el avance en las relaciones bilaterales a progresos en materia de consolidación democrática y respeto por los Derechos Humanos, por un acuerdo de cooperación con la isla, tal y como desea España durante su semestre de presidencia europea. "Espero que no logren consenso", admitió.

Roca justificó la necesidad de no eliminar la Posición Común actual de la Unión Europea --que para el Gobierno cubano supone una injerencia en sus asuntos internos-- porque "Cuba es una dictadura" y recordó que "uno de los principios de la Internacional Socialista es la solidaridad, pero la solidaridad con los de abajo, no con los de arriba". A su juicio, debe haber "solidaridad con los represaliados no con el Gobierno", concluyó.