SEVILLA 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Legado Expo Sevilla, que defiende la huella arquitectónica y cultural de la exposición universal de 1992, ha convocado una "acción protesta" para las 16,30 horas del viernes en la puerta de la Barqueta, contra el "abandono y la mala gestión" del espacio de la Cartuja, escenario de aquella muestra internacional y marcado ahora por el incendio del auditorio por causas que investiga la Policía Nacional, entre otros aspectos.
En su convocatoria, el colectivo llama a esta "protesta" ciudadana ante aspectos como el cambio de usos planteado por el Ayuntamiento de Sevilla y la Junta de Andalucía para que el antiguo Canal de los Descubrimientos admita actividades terciarias, marco que abarca a servicios de hostelería, hoteles u oficinas.
Mientras el Gobierno local del popular José Luis Sanz y la Junta defienden que la medida redundaría en servicios para la ciudadanía y mayor atractivo para la Cartuja, el colectivo avisa de que la operación podría suponer la "destrucción del espacio público y de sus elementos singulares", manifestando su temor ante una posible "alteración de la ordenación urbanística actual del Parque Científico y Tecnológico Cartuja en favor de los promotores inmobiliarios y en contra del interés general".
Además, Legado Expo señala el "abandono" de los Jardines del Guadalquivir, que se extienden entre el antiguo Pabellón del Futuro y la dársena del río y donde fueron plantadas unas 190 especies vegetales procedentes de los cinco continentes, un espacio verde perteneciente a la Junta de Andalucía y cuya cesión al Ayuntamiento negocian ambas partes; toda vez que el estado de conservación de este emblemático parque de la exposición universal de 1992 sobrevuela cíclicamente el debate público y político de Sevilla.
El colectivo ciudadano señala lo mismo respecto al auditorio de la Cartuja, cuyo control recuperaba recientemente el Ayuntamiento, después de que años atrás iniciase la rescisión del contrato de gestión del que gozaba la empresa TCM Audiovisión para la explotación del recinto, una decisión municipal recurrida por la entidad por lo Contencioso Administrativo, obteniendo en 2022 la suspensión cautelar.
Este emblemático recinto cultural está marcado por el incendio declarado en su interior el pasado 30 de noviembre, después de advertencias sobre actos de expolio y vandalización en sus instalaciones, toda vez que el Ayuntamiento defiende que va a "acometer actuaciones de urgencia" en el auditorio para "paliar los daños" del incendio, con idea de emprender más tarde "una inversión para que recupere las condiciones" de ser usado de nuevo con fines culturales.