Cs pide al alcalde de Bormujos y al PSOE que "asuman su responsabilidad para salvaguardar la estabilidad institucional"

BORMUJOS (SEVILLA), 21 (EUROPA PRESS)

Ante el juicio previsto por el Juzgado de lo Penal número ocho de Sevilla el 14 de junio para resolver la causa incoada contra el alcalde de Bormujos, el socialista Francisco Molina; y su concejal de Obras Públicas, la también socialista María del Carmen Garfia, por un presunto delito de prevaricación derivado de la autorización de obras en una nave supuestamente pese a los informes contrarios de la Intervención municipal, el Grupo municipal de Cs, que cogobierna en coalición con el PSOE, ha pedido al primer edil y al partido que "asuman las responsabilidades pertinentes para salvaguardar la estabilidad institucional" en la localidad.

Ciudadanos expone en ese sentido que debe "seguir velando por los valores de limpieza y regeneración abanderados" desde los "inicios" de la formación, "incluso durante la difícil situación sanitaria y la crisis económica y social que provoca la tercera ola del coronavirus".

"Ciudadanos es el único partido que combate la corrupción política y así seguirá exigiéndoselo a sus socios en todos los gobiernos en los que estemos presentes". "En estos momentos tan difíciles, Bormujos necesita un gobierno limpio, transparente y ejemplar. No podemos permitir que la sombra de la sospecha recaiga sobre nuestras instituciones", enfatiza la formación naranja, considerando que Francisco Molina y el PSOE deben asumir "las responsabilidades pertinentes para salvaguardar la estabilidad institucional en el municipio", donde ambas fuerzas gobiernan en coalición.

El alcalde, de su lado, ha asegurado que la mencionada vista oral gira en torno a una posible "irregularidad administrativa" y que la "parte penal" del asunto "fue desestimada". "Decir que tengo un juicio penal es mentir", aseveraba, tras el auto del Juzgado de Instrucción número cuatro de Sevilla que, en marzo de 2019, resolvió la apertura de juicio oral en su contra y en contra de su edil de Obras Públicas por un presunto delito de prevaricación cada uno de ellos, junto con otros dos acusados más.

Según Francisco Molina, está siendo víctima de una campaña de "acoso y derribo" por parte del PP para desencadenar "una moción de censura sin otra motivación que la ambición y los egos personales".