SEVILLA 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha procedido a la investigación de cuatro personas por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa cometido contra un agente de dicho cuerpo en el ejercicio de sus funciones.
Las investigaciones, llevadas a cabo por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Mairena del Aljarafe, se iniciaron a principios del pasado mes de mayo, cuando un guardia civil del Puesto Principal de Mairena fue atropellado por un todoterreno.
Dicho vehículo presentaba modificaciones similares a la realizadas a este tipo de vehículos por distintos grupos dedicados al narcotráfico y que operan en torno al río Guadalquivir.
Consecuencia de este hecho, el agente fue dado de baja para el servicio sufriendo la fractura de huesos y músculos de las piernas y que aún le mantienen incapacitado para el servicio.
El guardia civil se encontraba realizando labores de vigilancia dentro de un operativo especialmente establecido en una zona rural ubicada entre los municipios sevillanos de Almensilla, Coria del Río y La Puebla del Río.
Dicho despliegue había sido establecido como consecuencia de varias extracciones ilegales de combustible detectadas en el oleoducto que discurre por las localidades reseñadas y que pudieran guardar relación con el mundo del narcotráfico. Se trata de los conocidos como "petaqueros", quienes podrían estar valiéndose de ese combustible para el repostaje de las embarcaciones que utilizan para transportar las sustancias estupefacientes por el río Guadalquivir.
A primeras horas de la madrugada se llegaron a observar cómo varios drones sobrevolaban la zona controlada por los agentes, llegándose a mantener en estático durante varios minutos sobre el propio agente atropellado, quien se encontraba ubicado fuera de cualquier posible observación externa desde tierra y en un punto elevado. Evidenciándose el uso de cámaras térmicas instaladas en este tipo aparatos.
Tras estos vuelos, un todoterreno de gran potencia y especialmente modificado, se dirigió a alta velocidad hasta la ubicación del agente que se encontraba agazapado y en un punto elevado no visible desde tierra.
Después de varias maniobras bruscas en la zona, llegando a saltar sobre el propio agente y obligando a que éste se descubriera e identificara, procedieron de forma intencionada a su atropello sin que los agentes que se encontraba próximos, dada la velocidad del vehículo, pudieran evitarlo. Posteriormente huyeron a gran velocidad campo a través, al advertir la presencia del resto de vehículos policiales y agentes que se desplazaban en apoyo.
Ante lo sucedido, los investigadores concluyeron que los autores del atropello se valieron de las cámaras térmicas de los drones para poder detectar al agente y ubicarlo dentro de la noche cerrada, en el lugar apartado y escondido dentro del entorno.
Para las investigaciones se contó con la implicación y colaboración de la Policía Nacional de la localidad de Coria del Río y varias unidades de la Guardia Civil, se ha visto respaldado por la Autoridad judicial al entender a los cuatros investigados como autores de un delito de homicidio en grado de tentativa. Las investigaciones fueron dirigidas por la titular del juzgado de Instrucción nº 3 de los de Coria del Río.