SEVILLA 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Defensor del Menor de Andalucía, Jesús Maeztu, ha abierto una queja de oficio por el caso del bebé fallecido en Sevilla por presuntos malos tratos de sus padres, con la finalidad de conocer las actuaciones que pudieran haberse realizado ante los antecedentes conocidos "por la situación de riesgo" en la que se encontraba el menor.
Así lo han indicado a Europa Press fuentes de la Defensoría, que con esta actuación se han dirigido a los servicios sociales del Ayuntamiento de Sevilla, a la Unidad de Trabajo Social del Hospital Virgen Macarena, y al Ente Público de Protección de la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales.
El bebé murió el pasado sábado en el Hospital Macarena, en cuya Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) permanecía ingresado desde el lunes 12 con una fractura en el cráneo y también en las retinas, además de diversos moratones por diversas partes de su cuerpo, presentando lo que se conoce como 'síndrome del niño sacudido', ya que habría resultado lesionado tras ser zarandeado.
De este modo, fue el padre del bebé el que lo llevó al hospital, siendo detenido por la Policía Nacional en la jornada del martes junto a la madre del pequeño, aunque ésta quedó posteriormente en libertad con cargos.
El bebé pesó tan sólo un kilogramo y medio y nació de forma prematura en la cárcel, donde se encontraba interna su madre, por lo que fue ingresado en un centro hospitalario hasta que recibió el alta en el mes de febrero, cuando fue entregado a sus padres nuevamente, habiendo estado durante cuatro meses en un estado de "abandono total".
Los padres, que vivían de 'ocupas' en una vivienda de la barriada de El Cerezo de Sevilla capital, no habían llevado al bebé a alguna de las últimas consultas del niño sano que realiza periódicamente el pediatra.