SEVILLA 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha anunciado que se ha visto obligada a paralizar las obras de mejora y ampliación del colector Emisario Puerto en algunos de sus tramos, como en la zona de Palmas Altas y Las Razas, debido a la desconexión por Emasesa de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de San Jerónimo y el traslado de los caudales hacia la Cuenca Sur a través de la nueva conducción.
Según ha detallado la CHG en una nota, este trasvase ha provocado un aumento de los niveles de agua de más de 800 metros cúbicos por hora, lo que ha puesto en riesgo la estabilidad de las ataguías instaladas por las constructoras y la seguridad de los trabajadores. El cierre de la EDAR ocasionará un retraso y ralentización en el desarrollo global de este proyecto de adecuación de la red de tratamiento de aguas residuales de Sevilla, con el consiguiente perjuicio para los vecinos.
Todos los trabajos en ejecución se verán así afectados en mayor o menor medida, ya que si en algunos tramos no se ha llegado a parar las obras se está dificultando su desarrollo, y por el hecho de que la construcción de los distintos tramos esté interconectada, con cuatro contratas trabajando hasta alcanzar la EDAR del Copero.
En este contexto, la Confederación ha subrayado que tanto los técnicos de la CHG como del resto de administraciones implicadas y de las empresas constructoras mostraron a Emasesa, durante una reunión del pasado 4 de diciembre, su "preocupación" por el aumento de caudal derivado de la maniobra de cierre de la EDAR, por lo que propusieron que se pospusiera dejar fuera de servicio ésta al menos 15 días para avanzar en el desarrollo de los trabajos o hasta la finalización de los mismos.
De esta forma, la Confederación ha declarado que "no entiende que se haya adoptado esta medida después de más de dos años" de unas obras que, financiadas con fondos Feder y de la propia CHG, van destinadas a Emasesa y suponen un "importante beneficio" para el estuario y el espacio natural de Doñana, a la vez que constituye una obra "estratégica" para el saneamiento y la prevención de inundaciones en la ciudad. "La medida parece haberse adoptado en despachos en los que no se han tenido en cuenta las opiniones de los técnicos", ha aseverado.