SEVILLA 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, ha augurado este miércoles "dificultades" en el suministro de agua en los municipios que se abastecen por acuíferos, concentrados en su mayoría en la Sierra Morena sevillana y la Sierra Sur. "Tenemos activado un dispositivo y llevamos meses trabajando para evitar en lo posible las consecuencias de la sequía", ha señalado. En declaraciones a Europa Press con motivo de la recepción en la caseta municipal en la Feria de Sevilla de los alcaldes de la provincia, Rodríguez Villalobos ha explicado que los pueblos que se abastecen de acuíferos, cuando no llueve y bajan las reservas de éstos, tienen "dificultades". Para intentar paliar los efectos de la sequía, el organismo provincial ha invertido más de 17 millones de euros en obras de emergencia y potabilizadoras para que "podamos suplir" la falta de lluvias con "otros medios".
El presidente de la Diputación ha recordado que ya está en vigor la declaración de prealerta por sequía, lo que ha llevado aparejadas restricciones en consumos urbanos tales como el riego, baldeo y llenado de piscinas. Si la sequía persiste, "tendremos que ir a alerta por sequía y, con ello, a medidas más restrictivas". Rodríguez Villalobos ha reconocido la "preocupación" existente y ha hecho un llamamiento a ser "conscientes de que el agua es un bien común, que hay una parte de la agricultura muy dañada y que tenemos que ir pensando para el futuro qué podemos hacer" para buscar alternativas.
La Diputación de Sevilla ya ha alertado incluso en el Parlamento de que la situación en la comarca de la Sierra Morena sevillana es "grave" y "se agravará más" a medida que esté más cerca el verano. "Estamos perforando donde podemos. No hay manera de encontrar agua", señalaba en la Cámara andaluza el organismo provincial. La Sierra Morena de Sevilla cuenta con diez municipios donde viven 25.000 personas, población que crece de manera exponencial en vacaciones por las segundas residencias.
La advertencia la verbalizaba Jaime Morell, subdirector del Área de Servicios Supramunicipales de la Diputación tras apuntarla la diputada responsable de este departamento, María Regla Martínez, que recordaba que, "hace dos años", los municipios afectados por problemas en el suministro de agua en la Sierra Morena sevillana y la propia Diputación remitieron a la actual Junta de Andalucía el proyecto de ejecución --redactado por el organismo provincial-- para hacer las conducciones con las que llevar el agua del embalse del Pintado a los hogares de esta comarca.
Algo más de 80 kilómetros de conducciones en pleno parque natural con las que ofrecer dos hectómetros cúbicos del año a la Sierra Morena sevillana, lo que "garantizaría de por el vida el suministro para el consumo humano". Esta infraestructura, ha recordado Martínez, es "muy necesaria" y está "olvidada", lo que "está condenando a una comarca al despoblamiento y pérdida de futuro".
"Realmente, es absurda la situación. Los municipios en cuyos términos están los embalses que abastecen al 80% de la población de la provincia, no pueden conectarse a ellos y sufren periódicos episodios de escasez, muy agravada en este momento", argumentaba la diputada del Área de Servicios Supramunicipales de la Diputación hispalense. Por eso, y ante la posibilidad de que "los problemas se incrementen durante este año, no sólo en la cantidad de recursos sino también en la calidad", la Diputación ha vuelto a solicitar a la Junta, ahora en sede parlamentaria, que este proyecto sea declarado por el Consejo de Gobierno "de interés de la comunidad autónoma".
Jaime Morell explicaba que los suelos de la Sierra Morena sevillana son ricos en minerales como el hierro y el carbón. Son suelos geológicamente hablando son del periodo mioceno, lo que condiciona el tipo de acuífero en el subsuelo, "pequeños y muy sensibles a la falta de lluvia". Esto, unido a los "sondeos ilegales" que se acumulan en la zona, están dificultando el hallazgo de "soluciones paliativas" a los problemas de suministro para el consumo humano.
Pero no se trata sólo de un problema de cantidad. También de calidad. En este punto, el subdirector del Área de Servicios Supramunicipales señalaba que el embalse Malpasillo, en Badolatosa, está sufriendo la situación que se vive en el pantano de Iznájar, en el que, al haber bajado "tanto" el nivel de agua embalsada, están subiendo los niveles de sulfatos permitidos por la normativa.
En este punto, tanto María Regla Martínez como Morell reclamaban a la Junta que "acepte regímenes de excepcionalidad sobre determinados parámetros de calidad de agua en el caso de que fuese necesario", siempre con un "control exhaustivo" de esos niveles. "Hay que priorizar los usos del agua y sus efectos, siendo la primera solución garantizar a todos los ciudadanos el abastecimiento de agua potable", puntualizaba la diputada de Servicios Supramunicipales.
La Diputación de Sevilla ha recordado en el Parlamento que las "consecuencias de la falta de ejecución de las infraestructuras previstas --correspondientes a la Junta de Andalucía-- en la situación de sequía climatológica que padecemos, se han concretado durante el año pasado en que nueve municipios de la provincia hayan sufrido restricciones, municipios en los que sólo ha actuado la Diputación movilizando más de 17 millones de euros en obras y actuaciones de emergencia".
Entre esas actuaciones, María Regla Martínez recordaba en la sede parlamentaria las actuaciones de búsqueda de nuevos recursos y mejora en la potabilización en Casariche, Badolatosa, Pedrera, Aguadulce, Coripe, Guadalcanal, Real de la Jara, Villanueva del Río y Minas y Las Navas de la Concepción, y la conexión del sistema Pinto-Odiel y Piedras con El Castillo de las Guardas y aldeas mediante una conducción de más de 18 kilómetros, "pendiente de la autorización del trasvase por parte del Consejo de Ministros de la documentación administrativa de la Cuenca Sistema Andaluz del Tinto-Odiel, reclamada desde hace nueve meses".