SEVILLA 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las Dragonas de Sevilla se medirán este sábado en el Campeonato de Andalucía de 200 metros, que se celebra en el Centro de Alto Rendimiento de La Cartuja y coincide con el Día Internacional del Cáncer de Mama, una efeméride muy especial para este equipo, formado únicamente por mujeres supervivientes de cáncer de mama; de ahí la categoría en la que compiten: BCS (por su siglas en inglés, Breast Cáncer Survivor).
En esta prueba participan mujeres que hace unos años pasaron por la enfermedad y siguen en tratamiento mientras compiten, y otras muchas "que, aún en las primeras etapas, se acercan a los barcos terapeúticos de los viernes buscando un espacio donde sobreponerse no sólo físicamente sino también emocionalmente del shock de la enfermedad", explica Rocío Fernández, presidenta de la asociación BCS Sevilla, en un comunicado.
Todo el año organizan actividades para aquellas mujeres que necesitan "volver a la normalidad después del parón de la cirugía, los tratamientos y decenas de visitas al hospital". Y es que, el 64% de mujeres necesitaron ayuda psicológica tras la enfermedad, por lo que "estamos muy orgullosas de poder servir de ejemplo para otras mujeres que ahora mismo estén transitando por el cáncer y llegar a este día conmemorativo, paleando y demostrando que el deporte es esencial para mejorar el bienestar general".
"La enfermedad lo arrasa todo y lejos de lo que se vende no es un cáncer rosa", apunta Isabel Lovillo, una de las 'marcas' del equipo. "Se pasa muy mal y nos hacen falta muchas cosas cuando nos dan el alta a nivel de nutrición, psicooncólogos, información sobre todos los efectos secundarios de los tratamientos, como los dolores persistentes o la fatiga, además de cómo volver al trabajo o a la vida social".
El deporte para todas ellas es esencial. Entrenan cinco días a la semana en el río Guadalquivir durante todo el año. "Está demostrado científicamente que es muy beneficioso para recuperar la movilidad y prevenir el linfedema", señala Raquel Avilés, otra de las "veteranas" de Las Dragonas.
"Nosotras no somos heroínas, somos supervivientes, con todo lo que éso significa. Me gusta decir que el cáncer nos convirtió en Dragonas que echamos fuego por la boca, y no nos rendimos", asegura Nuria Tamayo, quien sufrió el cáncer en 2019 y se unió al equipo cuando aún estaba en radioterapia. "Para nosotras ir a palear al río es como cumplir parte de un tratamiento que nadie nos ha prescrito, pero que hemos experimentado como beneficioso, y ahora ya los oncológos lo recomiendan y les hablan a las mujeres en consulta de nosotras, lo cual es muy satisfactorio".