SEVILLA 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un estudio realizado por el catedrático de Análisis Económico de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) de Sevilla, Antonio Villar, e incluido en el informe Programme for International Assessment or Adult Competencies (Piaac) --mejor conocido como el 'PISA de adultos'-- alerta de la "descapitalización" de los niveles educativos del país y la aceleración de la pérdida de habilidades cognitivas como consecuencia de las "altísimas" tasas de desempleo de la nación.
Según ha expuesto Villar a Europa Press, el estudio, que supone una parte de las conclusiones de un informe realizado sobre una muestra de 6.000 individuos de 16 años --fin de la educación obligatoria-- a 65 años --edad general de jubilación--, constata que la educación y el empleo "no son aspectos separados" y que con los actuales índices de paro se está incurriendo en "un coste muy alto".
"Con unos niveles de estudio cuya duración es más larga que nunca, los resultados vienen a mostrar que se está perdiendo ese capital invertido", avisa el docente, que apunta en este sentido que la lógica depreciación por la edad de las habilidades cognitivas se ve acelerada en función de la situación laboral de los afectados.
Y es que el principal problema es la "falta de uso" de los estudios cursados por estas personas a causa del desempleo, una problemática que al margen del drama personal y familiar que suele traer consigo supone "una consecuencia adicional desde el punto de vista colectivo".
En este trabajo se realiza una evaluación de las habilidades cognitivas de las diferentes generaciones de españoles adultos, usando la información sobre las distribuciones de cada grupo en los cinco niveles de competencia matemática definidos en el Piaac. Así, se comprueba que la educación formal es el determinante básico del valor relativo del capital humano de las diferentes cohortes y que, así, los procesos de aprendizaje continuado y una adecuada integración en el mercado laboral son "claves" para mantener el 'stock' de capital humano.
Aunque no es objeto directo de su estudio, Villar también apunta que los cambios en los sistemas educativos tienen "costes de transición", puesto que la generación que sufre las modificaciones del sistema educativo va bajando los rendimientos, fenómeno análogo al observado en determinadas generaciones universitarias, lo que el catedrático justifica en razones como la mayor entrada de gente, la imposición de nuevos planes (Bolonia) o el cambio del número de años a cursar en las carreras.
Por último, y en comparación con los guarismos de otros países, el estudio establece que el retraso "relativo" de España no parece que vaya a arreglarse solo, pues "los hijos de familias con más nivel educativo tienen mejores resultados, pero son peores comparados con otros países: si no hacemos nada, la situación no se arreglará por sí misma".