SEVILLA 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente de la patronal andaluza de la construcción, Fadeco, Juan Aguilera, ha pedido a la Junta de Andalucía que "mantenga su postura" de defensa del mantenimiento de las ayudas a la vivienda protegida, tras lo que ha demandado a la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, que "eche números económicos, sociales y de empleo, pues con las ayudas a los compradores recupera con creces lo que invierte".
En declaraciones a Europa Press, Aguilera espera que el Plan Andaluz de Vivienda "se lleve a cabo en su integridad" y exige el Gobierno central que "cumpla con sus promesas y no nos engañe, pues el Plan Estatal es una trampa y un engaño", toda vez que, según apunta, "hace escasamente un año nos pusieron la golosina en la boca con un plan estatal de vivienda y los promotores llevamos a cabo unas inversiones importantes que ahora nos llevarán a la ruina como consecuencia de las decisiones del Ministerio, que nos deja tirados en la cuneta".
Por ello, pide al Gobierno que sea "responsable de sus actuaciones" y demanda a la ministra que "eche números", toda vez que "suprimiendo las ayudas a la VPO, el Ejecutivo dejará de recaudar bastante más de lo que supone esa supresión".
"Si la supresión de la subvención supone un ahorro al Ministerio de 7.000 euros por cada vivienda, el Gobierno no debe olvidar que está cobrando al adquirente el IVA y que dejará de ingresar 10.000 euros", asegura Aguilera, quien apunta que "siempre que se construye una vivienda, el balance es rentable para el Estado y al invertir en ayuda al adquirente una determinada cantidad, se recupera con creces todo lo que invierte".
Agrega que esos recortes en las ayudas a la vivienda "no son iguales que los recortes en obra pública".
Aguilera pide a la Junta que "mantenga su compostura" ante el Gobierno y le advierte de que "para poder cumplir y hacer efectiva la Ley de derecho a la Vivienda, que la Junta promulgó, el gobierno andaluz tendrá que hacer frente y el dinero que no ponga el Ministerio lo tendrá que poner la Junta".
"Dejar de construir una vivienda le cuesta dinero al Estado y la ministra, en vez de dejarnos en la cuneta, se debe poner a hacer números de una vez", asevera Aguilera.
Asimismo, advierte de que la supresión de las ayudas "supondría una herida de muerte para el Plan Andaluz de Vivienda y para un derecho básico de Andalucía, recientemente promulgado por la Junta a través de una ley".