SEVILLA 23 May. (EUROPA PRESS) -
La secretaría general de Agricultura y Alimentación del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha apuntado a la existencia de un "error de procedimiento" que "habrá que subsanar" como motivo del hecho de que la Comisión Europea haya decidido aparcar el veto a las aceiteras reutilizables en bares y restaurantes, un aparcamiento donde han influido "presiones de países no productores", por lo que García Tejerina anuncia que el Gobierno "presionará en sentido contrario".
En declaraciones a los periodistas en Sevilla, García Tejerina reconoce que el Gobierno "no está contento", toda vez que "adoptar medidas como ésta en favor del aceite de oliva era una de las cuestiones que habían sido impulsadas por el Ministerio".
García Tejerina considera que "hay margen de maniobra para reaccionar, pues la legislación en la UE tiene unos ritmos bastante lentos, y esto es una propuesta de la Comisión, no significa que no se vaya a llevar a cabo sino que nos tocará trabajar un poco mas para poder conseguirlo y lograr que la medida inicial sea definitivamente aplicada".
En ese sentido, ha recordado que el Ministerio invitó al comisario Dacian Ciolos a visitar el olivar de Andalucía hace un año aproximadamente para conocer la realidad del olivar "y a partir de esa visita del comisario, donde vio la importancia del aceite y del cultivo, el propio Ciolos lanzó una serie de medidas para mejorar la calidad y la producción, y una de ellas se dirigía a garantizar la calidad a través del control del aceite en los establecimientos públicos".
Por ello, García Tejerina considera que la marcha atrás "se ha debido por un error de procedimiento, que habrá que subsanar", a lo que se une el hecho de que "hay países no productores, que no tenían interés en que esa medida se adoptara, y que han detectado ese error de procedimiento y han presionado a la CE".
Así, García Tejerina ha advertido de que el Gobierno español "hará lo propio pero en sentido contrario, de forma que, si es necesario, se subsanarán los errores de procedimiento y una vez subsanados pediremos que se vuelva a poner en marcha esta medida".
Considera que esa medida "va en interés absolutamente de todos, de productores, industriales, almazaras y en beneficio de los consumidores, no solo de los países productores y de los que conocemos la cultura del aceite y apreciamos al calidad de este producto, sino en beneficio de consumidores de otros países para que sus aceites de oliva cuenten con todas las garantías".