SEVILLA 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
Alfredo G.C., el varón de 50 años de edad y nacionalidad boliviana detenido por matar presuntamente a su expareja, de la misma edad y nacionalidad, y ocultar después su cadáver entre unos juncos en el tramo del río Guadalquivir correspondiente al barrio sevillano de San Jerónimo, fue condenado en 2020 por un delito de lesiones en el ámbito de la violencia de género sobre la víctima a 40 días de trabajo en beneficio de la comunidad y 16 meses de alejamiento de la fallecida, así como la prohibición de comunicarse con ella.
Así lo ha informado la Oficina de Comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), exponiendo que no consta ningún quebrantamiento de dichas medidas impuestas por el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número tres de Sevilla, tras un juicio rápido saldado por conformidad entre las partes, y que la pena fue cumplida.
El Juzgado de Violencia número tres lleva la causa por el crimen dados estos antecedentes previos y ha decretado el secreto de las actuaciones.
La mujer desapareció el pasado 25 de abril, siendo denunciado tal extremo ya el pasado 4 de mayo, toda vez que la identidad de la fallecida sigue pendiente de su plena culminación dado el estado que presenta el cadáver.
No obstante, la Policía Nacional trabaja sobre la hipótesis en firme de que se trate de Virginia T.G., de unos 50 años y de nacionalidad boliviana.
Tras unos dos meses de investigación a cuenta de esta desaparición, el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional ha detenido a este varón, expareja sentimental de la fallecida.
El arrestado habría declarado a los agentes, ante las pruebas incriminatorias en su contra, que tras el crimen se deshizo del cadáver ocultándolo entre unos juncos del brazo del río Guadalquivir correspondiente a San Jerónimo, donde los investigadores han recuperado ya el cuerpo.
De momento, la Policía Nacional continúa con su investigación, con la previsión de que el detenido sea puesto a disposición judicial este jueves o ya el viernes.