La médica agredida en Sevilla recibió "un puñetazo" de un familiar de un varón muerto tras un "retraso" en la asistencia

SEVILLA 18 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Sindicato Médico de Sevilla ha detallado que la nueva agresión a personal sanitario en la provincia ha acontecido en Aznalcázar, donde una médica ha recibido "un puñetazo en el cuello" por parte de una persona que reprochaba al equipo de profesionales su "tardanza" a la hora de acudir en auxilio de un familiar suyo en parada cardiorrespiratoria, que falleció pese a las maniobras de reanimación, toda vez que los profesionales habían sufrido un "retraso" al afrontar dificultades para localizar la vivienda en cuestión.

Según el sindicato, la madrugada del pasado sábado al domingo, los trabajadores del centro de salud de Pilas recibieron un aviso de prioridad uno para un domicilio situado en una urbanización a las afueras del municipio de Aznalcázar. Al trasladarse al lugar, los profesionales sanitarios tuvieron problemas para localizar el domicilio y sufrieron "un retraso en la asistencia", expone el sindicato.

Al llegar al domicilio, encontraron a un paciente en parada cardiorrespiratoria atendido por dos médicos, realizando labores de reanimación cardiopulmonar.

"Ante la valoración de que el paciente había fallecido, se decidió detener dichas labores, ya que no era viable continuar", señala el sindicato médico.

"A la salida del punto de atención, un familiar del fallecido, en estado de nerviosismo extremo, comenzó a increpar e insultar por la tardanza en la asistencia. La médica agredida intervino para pacificar la situación y acabó recibiendo un puñetazo en el cuello", detalla el Sindicato Médico, añadiendo que ante ello fue alertada la Guardia Civil.

El Sindicato Médico de Sevilla ha manifestado su apoyo "a todos los profesionales que siguen esforzándose ante tantas adversidades para que el sistema sanitario preste un servicio de calidad; exigiendo una vez más a la administración las medidas necesarias para evitar cualquier tipo de agresión a todos sus trabajadores y trabajadoras".

También ha recordado a la ciudadanía que "las agresiones no son la solución a sus problemas, sino que son un delito y como tal deben ser denunciados por el personal afectado".