La víctima le ha denunciado ya diez veces y el encausado le ha "generado una mayor situación objetiva de riesgo"
SEVILLA, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número uno de Dos Hermanas (Sevilla) ha resuelto "agravar la medida cautelar de alejamiento" impuesta a un varón condenado por delitos de acoso, amenazas y vejaciones sobre su expareja, en el marco de unas nuevas diligencias por presuntas amenazas y quebrantamiento de medida cautelar de este varón con relación a su antigua pareja, a la que ahora habría amenazado supuestamente con cortarle el cuello.
Más al detalle, dicha instancia judicial ha resuelto "agravar" las medidas cautelares impuestas al encausado, principalmente con la implantación de una pulsera electrónica de control.
En un auto emitido el pasado jueves 24 de octubre y recogido por Europa Press, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número uno de Dos Hermanas aborda unas diligencias incoadas por la nueva denuncia de una joven de 30 años contra un varón de 38 años identificado como J.L.M., por un presunto delito de quebrantamiento de condena o medida cautelar, así como por otro posible delito de amenazas.
El juzgado da cuenta de que sobre el citado varón pesa un auto del juzgado de Violencia sobre la Mujer número dos de Sevilla que merced a otras diligencias previas incoadas en 2023, le impuso la medida cautelar de prohibición de acercamiento o comunicación con su expareja, exponiendo que este hombre fue condenado además por delitos de acoso, amenazas y vejaciones sobre su antigua novia, condena traducida en penas de trabajos en beneficio de la comunidad y de prohibición de aproximación o comunicación con la víctima.
LA DÉCIMA DENUNCIA
En ese marco, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número uno de Dos Hermanas detalla que en su nueva denuncia, que sería la décima ya, la mujer alertaba de que el pasado 10 de octubre, este antiguo novio suyo con tales medidas de alejamiento ordenadas por la Justicia "se presentó en su domicilio y por el telefonillo" del bloque le dijo "te voy a cortar el cuello, guarra".
Según la denunciante, en dichas palabras pudo "reconocer sin ninguna duda la voz" de su expareja, viendo "parte de su cara" en las imágenes de la videocámara del portero electrónico, pudiendo además ver desde su vivienda cómo después se alejaba del bloque "un coche blanco" similar al que usa el citado hombre, al cual ha denunciado ya "nueve veces por acoso y amenazas graves", con la circunstancia de que el mismo "ha vulnerado la prohibición de aproximación y comunicación en varias ocasiones", pues ella ha recibido de él "multitud de correos con amenazas de muerte y vejaciones".
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número uno de Dos Hermanas precisa en su auto que el denunciado se ha acogido a su derecho a no declarar, siendo celebrada una vista en la que la Fiscalía y la acusación particular solicitaron su ingreso en prisión comunicada y sin fianza.
"NULO VALOR DISUASORIO" DE LAS MEDIDAS PREVIAS
A partir de ahí, el juzgado considera que los hechos denunciados revisten la apariencia de presuntos delitos de violencia de género y continuado de quebrantamiento de medida cautelar, considerando que procede "agravar la medida cautelar" ya impuesta, "dado el nulo valor disuasorio que para el investigado ha supuesto la condena y la medida actualmente en vigor".
"El investigado, haciendo caso omiso a las prohibiciones en vigor, ha generado una mayor situación objetiva de riesgo para la víctima", asevera el juzgado, que resuelve "agravar la medida cautelar" ampliando a 500 metros la distancia mínima de separación que habrá de respetar el investigado respecto a su expareja y con la orden de que le sea implantada al denunciado una "vigilancia, seguimiento y control" mediante una "pulsera electrónica" de control de su posición y la inscripción de la decisión en el Registro de Protección de Víctimas de Violencia de Género.