SEVILLA 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Servicio de Pediatría del Hospital Quirónsalud Infanta Luisa, en Sevilla, puntualiza un aumento significativo, aunque común, de las consultas de urgencia pediátricas diarias durante la época estival debido casos de impétigo, ya que, según el doctor Rafael Espino Aguilar, jefe del servicio, el impétigo es una de las infecciones cutáneas por excelencia en verano, sobre todo entre los niños de dos a cinco años.
Asimismo, Espino Aguilar expone que el aumento de las temperaturas origina una modificación de los mecanismos de defensa de la barrera cutánea, lo que unido a la mayor actividad de los niños y el aumento de picaduras de insectos --que originan picor y lesiones de rascado--son factores que justifican este aumento de casos de impétigos. "La aparición de las lesiones ocasiona gran preocupación en los padres, siendo el motivo por el que consultan de urgencia".
Por su parte, el doctor Andrés Osuna Vera, pediatra del Hospital Quirónsalud Infanta Luisa, explica que el impétigo es una infección superficial de la piel producida por bacterias que viven comúnmente en ella. Igualmente, el doctor precisa que el síntoma más destacable de esta infección es la aparición de costras amarillas.
"Empieza con una mancha o un granito rojo que se transforma en una ampolla y que al romperse deja finalmente la costra. Su evolución suele ser buena y no produce cicatriz residual. Puede desarrollarse en cualquier parte del cuerpo, siendo especialmente común en la cara, alrededor de la nariz, la boca y las orejas, aunque también se ve con frecuencia en los brazos y las piernas", precisa.
En este sentido, los especialistas explican que el origen de esta infección tiene lugar cuando se producen excoriaciones o pequeñas heridas de la piel, ya que al romperse la barrera cutánea se facilita la entrada a las bacterias que viven en ella. Al mismo tiempo, Osuna Vera detalla que hay que tener especialmente cuidado durante el verano ya que lo niños frecuentan playas y piscinas favoreciendo el juego y al estar con poca ropa son más proclives aún a lesionarse la piel, además de que la temperatura caliente del verano favorece también al crecimiento de estas bacterias.
"Para casos menos severos cuando las lesiones son pocas, leves y localizadas se usan antibióticos tópicos en crema, en cambio cuando no hay mejoría con las cremas puede ser necesario un antibiótico vía oral", subraya Osuna Vera, quien a su vez recalca que el impétigo es muy contagioso, y que suele producirse por el contacto directo de la piel entre un enfermo con uno sano, matizando que una vez iniciado el tratamiento con antibióticos se estima que en 48 horas el afectado deja de ser contigioso.
En concreto, el doctor hace hincapié en recordar que dado que la infección entra por la piel deben esquivarse las heridas y si estas ocurriesen es muy importante lavarlas bien con agua, jabón y aplicar lociones antisépticas. "En el caso de aparecer llagas debe evitarse el rascado y no compartir toallas u otros objetos con niños con lesiones activas", concluye Osuna Vera.
Finalmente, el doctor Rafael Espino Aguilar aconseja que ante la aparición aguda de lesiones cutáneas en niños siempre se debe consultar con un pediatra para una adecuada valoración clínica y un tratamiento dirigido a la causa de las mismas.